Gibrán Rodríguez Mejía recibió una condena de 8 años de cárcel luego de que se declaró culpable de haber hecho blanqueo de activos para el cártel de Sinaloa.
El hombre de 31 años, abogado de formación y oriundo de Sinaloa, fue condenado por el blanqueo de 3.5 millones de dólares a través de una casa de cambio de divisas.
Tras hacer la operación en los activos, Rodríguez Mejía proporcionaba cuentas financieras en México en las que el dinero se depositó para beneficio de los narcotraficantes con sede aquí.
El dinero que manejaba Rodríguez Mejía, dicen documentos de la corte federal de San Diego, California, prevenía de “los ingresos de cantidades de varios kilogramos de cocaína, metanfetamina y heroína introducidas de contrabando en EU por el cártel de Sinaloa”.
Según evidencia mostrada por la Fiscalía, el abogado coordinó envíos de hasta 100 mil dólares desde Filadelfia, Pensilvania, a México.
Las autoridades también señalan que el abogado formaba parte de una red de al menos 20 personas, que se dedicaron a lavar dinero para la organización que presidió Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Otros tres acusados han presentado previamente declaraciones de culpabilidad en este caso y han sido condenados (Omar Ayón Díaz; Osvaldo Contreras Arriaga; y Joel Acedo Ojeda) y otros dos (César Hernández Martínez y Oscar Rodríguez Guevara) han presentado declaraciones de culpabilidad.
El sentenciado fue detenido en la plaza comercial Minarete el 15 de diciembre de 2017 en Tijuana, Baja California, por la entonces Procuraduría General de la República. Sin embargo, esa no fue su primer aprehensión, en 2015, fue detenido por elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en posesión de nueve kilos de cristal y un arma de fuego, pero fue liberado poco tiempo después.
Tras su captura en 2017, fue extraditado a California en septiembre del año pasado para enfrentar cargos por lavado de dinero. NR