Con el cierre de año ha llegado la conclusión del primer periodo de sesiones ordinarias del segundo año de trabajo de la actual legislatura del Congreso mexicano. Los resultados y los balances llaman a las puertas del Palacio Legislativo de San Lázaro, sede de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, en la que sus moradores entregan buenas cuentas a la población.
Desde el 1 de septiembre pasado, cuando los ocho grupos parlamentarios dieron inicio a la actividad ordinaria y recibieron el cuarto informe de gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, la actividad se centró en la glosa, así como en el análisis de la propuesta del paquete económico para el año entrante. El trabajo consensuado fue la constante de la labor parlamentaria, la cual mostró capacidad de respuesta a las necesidades sociales, económicas y políticas de México, así como al fortalecimiento de las instituciones públicas. El desempeño de los coordinadores parlamentarios, comprometidos con los altos intereses de México, permitió llegar a acuerdos aún en los temas más controversiales. El Dr. César Camacho, comandando el PRI, fue crucial para generar acuerdos y alentar las propuestas que buscaban fortalecer el trabajo parlamentario. El coordinador del tricolor ha sido un actor fundamental en las buenas cuentas que el Legislativo entrega a la población. Entre septiembre y diciembre el Pleno aprobó un total de 100 dictámenes, los cuales se tradujeron en cuatro reformas constitucionales, cuatro nuevas leyes y la reforma a 103 ordenamientos existentes y 11 decretos. Se dice fácil, pero construir los acuerdos aún en los temas más elementales del funcionamiento de la Cámara de Diputados requiere tiempo, disposición y una franca labor política. Oficio que en la Cámara de Diputados brilla por su presencia y aplicación en su vida diaria.
@jlcamachov