Con el objetivo de afinar la estrategia de pacificación del país que presentará esta semana, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, se reúne con su futuro gabinete de seguridad. Al encuentro acudieron, el futuro titular de la Secretaría de la Defensa Nacional(Sedena), Luis Cresencio Sandoval; el siguiente titular de Marina, José Rafael Ojeda; el próximo titular de Seguridad Pública, Alfonso Durazo; la ministra y futura secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. Además, se pudo ver en la casa de transición en la colonia Roma de la Ciudad de México al coordinador de asesores, Lázaro Cárdenas Batel; el futuro subsecretario de derechos humanos de la Segob, Alejandro Encinas y el asesor en materia de seguridad, Alejandro Gertz Manero.
A su llegada, Durazó adelantó que la estrategia de seguridad no plantea compra de armamento, ni gasto en tecnología, porque el Estado Mexicano cuenta con suficiente capacidad tecnológica y de armamento.
“El Estado Mexicano cuenta con la suficiente capacidad tecnológica y de armamentos y así es que no habrá compras. Las prioridades presupuestales estarán orientadas en otros rubros”, dijo. Adelantó que el plan de seguridad tendrá un rediseño y hará énfasis en problemas de seguridad común. “El programa de seguridad obviamente enfrentará todos aquellos acciones y grupos que representen un riesgo para la seguridad pero el énfasis estará en aquellos problemas de seguridad pública que más afectan a la población robos, asaltos a mano armada, secuestro, extorsión, cobro de pisos y en coordinación con las autoridades estatales y municipales porque se tratan de delitos del fuero común”, sostuvo.