Por primera vez, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que existen denuncias en contra de Carlos Romero Deschamps, líder sindical petrolero, y lo invitó a enfrentarlas, pero fuera del cargo que ha ocupado por 26 años.
“En este caso hay denuncias presentadas ante la Fiscalía, recordar que todo lo que nos llega se tramita, se le da curso y hay denuncias en la Fiscalía General. Si él toma la decisión de dejar el sindicato para atender estos asuntos está en su derecho, nosotros no nos vamos a meter”, afirmó.
El Presidente aseguró que esta no es una negociación, que es una decisión propia del dirigente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, pero que su gobierno no impondrá un nuevo dirigente ni meterá mano en la elección.
“Nosotros no podemos actuar de esa manera, no es una negociación. Si él quiere dejar el cargo para enfrentar su asunto, como lo hizo el ministro Medina Mora; hay denuncias, ellos ven en la fiscalía si van a resultar culpables, si se van a consignar esas denuncias al juez. Yo pienso que él que tiene una denuncia de este tipo, y al mismo tiempo está a cargo de un sindicato, tiene esa responsabilidad, o un servidor público, lo mejor es no involucrar a las instituciones”, detalló.
López Obrador llamó a Romero Deschamps a resolver las investigaciones, con la certeza de que no existirá persecución y con total apego a la legalidad.
“Él sabrá cómo responder a las denuncias presentadas, sin que haya persecución, sino con apego a la legalidad, a los elementos de prueba que existan. En le caso de que sea responsable de algún delito, pero él va a resolver estos asuntos, no vamos nosotros a quitar a un dirigente, para poner a otro dirigente”, afirmó.
En cuanto al cargo, el mandatario señaló que deberán ser los mismos trabajadores quienes elijan un sustituto, de acuerdo a la ley y a los estatutos del sindicato, en este caso, el petrolero.
Aunque el mandato de Romero Deschamps, que inició en septiembre de 1993, termina en diciembre de 2024, el dirigente sindical planea dejar el cargo antes de lo previsto por las acusaciones en su contra.
En enero de este año, el tabasqueño había rechazado que existiera una investigación en contra del exsenador por presuntamente otorgarle información sobre huachicol en Pemex, a cambio de protección, luego de que solicitara un amparo para evitar cualquier orden de aprehensión en su contra.
Para julio, el presidente López Obrador señaló que en su gobierno no habría privilegios en contratos ni con dirigentes, por lo que se revisarían cada uno de los contratos colectivos sostenidos con el sindicato petrolero para ajustarse a la legalidad y austeridad.
Unos días después, se dio a conocer que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda había presentado dos denuncias ante la Fiscalía General de la República, contra de Carlos Romero Deschamps y seis de sus familiares, por los presuntos delitos de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito.
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