Arturo Gómez Pérez, presidente municipal de Petatlán, Guerrero se encontraba cenando al filo de la medianoche del jueves en la pozolería “Casa Vieja” cuando fue atacado a balazos. Aunque fue trasladado a un hospital, la gravedad de sus heridas en su tórax y cabeza impidieron que los doctores pudieran hacer más para salvarlo. Así, el edil se convirtió en una víctima más de la violencia que se ha registrado contra autoridades municipales en el país y que en lo que va de sexenio de Enrique Peña Nieto contabiliza la muerte de casi cien alcaldes y exalcaldes. De acuerdo con el portavoz de Seguridad del gobierno de Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, cerca de las 23:45 horas, la policía estatal recibió un reporte de que el funcionario había sido atacado a balazos mientras cenaba en un restaurante de la región de la Costa Grande. Relatos de testigos presenciales indican que un hombre encapuchado disparó contra el edil, a quien después de practicársele la necropsia de ley se le encontraron tres impactos de arma de fuego, uno de ellos mortal. Un grupo especial encabezado por el Coordinador de la Policía de Investigación Ministerial se encuentra en la zona para realizar las investigaciones del caso.
¿Muerte anunciada?
En menos de 13 meses dos colaboradores cercanos al alcalde fueron asesinados con extrema violencia, un hecho que debió alertar a las autoridades. El 15 de noviembre de 2016, Edgar García Cerda, director de Desarrollo Urbano de Petatlán, fue ultimado a balazos en las inmediaciones del paraje conocido como Camino a la Virgen. Su cuerpo presentaba varios impactos de bala y tenía las manos amarradas. Su familia había denunciado su desaparición horas antes. Mientras que el 5 de julio de este año, Manuel Rebolledo Pérez, secretario general del Ayuntamiento, fue encontrado sin vida dentro de bolsas de plástico en el entronque de la carretera nacional a Lázaro Cárdenas, en Zihuatanejo, menos de 24 horas después de que se dejara de tener comunicación con él. Presentaba impactos de bala en la cabeza y el pecho.
Jueves negro para el PRD
El jueves fue un día negro para el PRD, que en menos de 24 horas enfrentó la muerte de Gómez Pérez y la de Saúl Galindo, precandidato a la alcaldía de Tomatlán, Jalisco, quien fue baleado en una carretera de su tierra natal, mientras circulaba junto a su hijo. Gómez Pérez también es el segundo edil perredista en funciones asesinado en Guerrero en los últimos dos años y el octavo en lo que va de 2017. Mediante su cuenta de Twitter, el gobernador del estado de Guerrero, Héctor Astudillo, calificó de “cobarde y artero” el crimen contra Gómez Pérez, y exhortó a la FGE a realizar una pronta investigación y esclarecer estos hechos, así como a detener a los responsables y someterlos al proceso correspondiente. https://twitter.com/HectorAstudillo/status/946739566744137729 La muerte de Gómez Pérez se suscita apenas 11 días después de que fuera asesinado Sergio Zenteno Albores, alcalde de Bochil, Chiapas. De acuerdo con seguimiento de los crímenes realizado por ejecentral en lo que va de la gestión de Peña Nieto han sido asesinados 93 alcaldes, incluidos aquellos que ya habían dejado el cargo y los que fueron electos y murieron mientras esperaban asumir el cargo.