#MinistrosCarnales o una corte a modo

18 de Abril de 2024

Hannia Novell

#MinistrosCarnales o una corte a modo

El Poder Judicial enfrenta una nueva embestida de la 4T. Con el combate a la corrupción como estandarte de batalla, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) impulsa una iniciativa de reformas para aumentar el número de ministros y pulverizar el último resquicio de contrapeso al poder presidencial de Andrés Manuel López Obrador.

Con la euforia de una mayoría parlamentaria —simple y vulnerable, pero mayoría al fin— Morena tuvo desde el principio el objetivo de concentrar el poder político y aniquilar otro contrapeso de la República: el Poder Judicial.

La primera ofensiva, que de manera eficaz ganó en la opinión pública, fue señalar los privilegios y canonjías de jueces y ministros. Hoy quieren crear una Sala Anticorrupción para designar a cinco nuevos ministros, #MinistrosCarnales, aliados, dispuestos a avalar los designios del líder máximo. Una Corte a modo.

Actualmente, la Suprema Corte de Justicia (SCJN) funciona a través de dos órganos: el Pleno, que se integra por sus 11 miembros; y dos salas. La Primera Sala resuelve asuntos civiles y penales, y la Segunda Sala los de carácter laboral y administrativo. Ambas pueden conocer de casos de corrupción, dependiendo de su naturaleza, es decir, que sean de tipo penal o adminisrativo.

La iniciativa que presentó el coordinador de los senadores morenistas, Ricardo Monreal, está viciada desde el origen. Si la 4T está empeñada en adelgazar el aparato burocrático, resulta un contrasentido la incorporación de cinco nuevos ministros para integrar una Tercera Sala de la Corte, lo cual implica contratar secretarios de estudio y cuenta, actuarios y personal administrativo.

Así, pues, un gasto adicional calculado en 200 millones de pesos anuales. ¿Y la austeridad republicana que han pregonado?

Además, el proyecto de reformas constitucionales que impulsa Morena en el Senado no da cuenta de la estadística judicial relacionada con los casos de corrupción resueltos por el alto Tribunal. Quizás omitieron este inventario porque la revisión de los estrados de ambas Salas nos permite asegurar que el volumen de este tipo de asuntos no justifica la creación de la denominada Sala Anticorrupción. ¿Y la desaparición de la burocracia fifí que han prometido?

La iniciativa que el senador Monreal consideró necesaria para sacudir al Poder Judicial no sólo amenaza la independencia de la impartición de justicia, sino que atenta contra los contrapesos que deben existir en todo Estado democrático. A continuación las razones.

Actualmente hay 11 ministros. Juan Luis González y Yazmín Esquivel fueron nombrados por el presidente Andrés Manuel López Obrador. En 2021 concluirá el periodo del ministro Fernando Franco por lo que López Obrador tendrá un tercer ministro aliado.

Si agregamos los cinco nuevos ministros que integrarían la Sala Anticorrupción, en dos años, el líder máximo de Morena contaría con el voto de ocho ministros afines, leales y comprometidos con SU proyecto de nación. Ocho #MinistrosCarnales.

Con la nueva integración que propone Morena, el pleno de la SCJN estaría integrado por 16 ministros y serían necesarios 11 votos para invalidar cualquier norma general. Aquí es donde toman relevancia los #MinistrosCarnales, porque esos ocho votos serían suficientes para rechazar las controversias constitucionales y acciones de inconstitucionalidad que la oposición haya impulsado contra las leyes promulgadas por el gobierno de esta 4T.

Así es que, cualquier ocurrencia o decisión presidencial, tendrá el apoyo de una mayoría legislativa y el aval del Poder Judicial. Entonces, una República sin división de poderes, será una democracia sin legitimidad o un pasito más cercano al divino camino de Maduro.