Hace algún tiempo se reunieron Rosario Robles, secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, y el candidato del PRI a la Presidencia, José Antonio Meade, para platicar sobre una eventual candidatura de la doña al Senado. Por supuesto, dicen que le dijo Meade, pero advirtiéndole que no habría apoyo. Oséase, el que al final cuenta, el de los pesos y centavos. Si es así, respondió doña Rosario, mejor se queda en el gabinete a terminar su gestión. Esto fue antes de que la Auditoría Superior de la Federación revelara que doña Rosario tiene irregularidades y dineros no comprobados por más de cinco mil millones de pesos, lo que le ha llevado a cambiar de opinión. Dicen los que saben que la señora Robles está buscando que sí le den una senaduría plurinominal, aunque no haya ningún otro tipo de apoyo. Fuero, es lo que anda buscando, por aquello que se pueda convertir en un chivo expiatorio de quien sea el próximo presidente.