El poder del turismo y su impacto

23 de Abril de 2024

Eduardo Penafiel

El poder del turismo y su impacto

EDUARDO

En el más reciente Reporte de Competitividad, Viaje y Turismo del Foro Económico Mundial, México se encuentra en la posición 22 de los países con la mejor competitividad turística, escalando 8 posiciones en los últimos dos años. Este es un dato muy relevante porque la industria del turismo aporta poco más del 10% del Producto Interno Bruto, lo que representa unos 7.6 billones de dólares. Y a pesar de la inseguridad y el entorno sociopolítico que vivimos, turistas internacionales siguen llegando a México y los locales siguen viajando dentro del país cada vez que tienen oportunidad de hacerlo.

Pero en los últimos años, esta industria ha visto una serie de factores que han modificado la forma de operar y de generar ingresos. Quizá el principal factor sea tecnológico, en donde el modelo de ir a una agencia de viajes a planear una vacación poco a poco ha sido reemplazado por canales digitales, a través de sitios de internet especializados y sobre todo por la influencia de las redes sociales, en donde hoy es más fácil encontrar una buena recomendación, mejores precios y más opciones para visitar.

Esto es una respuesta directa a las necesidades y hábitos de las personas que están cambiado la forma de viajar, de vivir la experiencia y principalmente, la manera de compartirla. Las nuevas generaciones han dejado atrás las postales, revistas y los álbumes de fotos como referencia, migrando a un ecosistema digital que les ofrece millones de videos con personas compartiendo las experiencias de cada lugar y momento, lo que tiene un peso mucho más grande que una recomendación de casi cualquier agente de viajes.

Estos factores obligan a hoteles, sitios turísticos, restaurantes y todos aquellos que dependen o generan ingresos a partir del turismo, a modernizar su oferta y a adaptarse ante un viajero más exigente, pero también mucho más responsable con su gasto. Para lograr esto, existe una tendencia clave: Conectividad.

Esta tendencia se refiere no solamente a que el usuario esté conectado en todo momento para poder compartir una foto, un video o una experiencia con el mundo, sino que en el lugar donde se encuentre, tenga acceso a una diversidad de servicios y a lo mejor que puede ofrecer un destino.

Por ejemplo: alguien que está visitando el Cañón del Sumidero en Chiapas, debe de contar con la seguridad que en caso de un accidente, la conectividad con los servicios de salud del lugar sean de fácil acceso. Y de igual manera, debe de ser capaz de cambiar su itinerario, mover su boleto de avión y reservar un lugar para cenar, en caso de querer extender un día más su vacación.

El éxito de la conectividad está basado en la colaboración de los gobiernos locales con sus habitantes. Cuando esta colaboración funciona, un hotel, un museo, una tienda de ropa y demás lugares se convierten en sitios turísticos capaces de generar más ingresos, gracias a la exposición y recomendación de turistas internacionales y locales, que son capaces de compartir de manera inmediata su interacción, generando una retroalimentación valiosa para mejorar la experiencia.

Esto fortalece a los proveedores de servicios turísticos, mejorando la oferta de cada lugar pero también logra que el turismo no solamente se concentre en las grandes ciudades, playas o sitios turísticos tradicionales, sino que tenga la capacidad de expandirse a otros lugares que hace algunos años, no tenían exposición y que hoy tienen potencial para atraer a turistas de todo el mundo, ayudando a la economía del lugar.

Mejorar la oferta muchas veces depende de nosotros y no de un proveedor de servicios turísticos, al compartir lo bueno y exigiéndole a nuestro gobierno que mejore o arregle lo que no está bien, para que México siga fortaleciendo su economía a través del turismo y por consecuencia, mejore nuestra calidad de vida.