Andrés Manuel López Obrador dijo que lo sucedido ayer en Culiacán “fue un asunto delicado”, pero reiteró que la decisión que se tomó “marca la diferencia” para demostrar que hay un nuevo gobierno y una nueva política de seguridad.
“Había una orden de aprehensión de un delincuente famoso, pero hubo reacción de esta banda. Se armaron y se estaba poniendo en riesgo la vida de mucha gente, tanto de los mismos delincuentes como de soldados, de policías, de servidores públicos y de gente civil. Iba a ser una situación muy difícil.
“Y se tomó la decisión de no continuar con la acción de detención de esta persona. En la mañana lo dije y lo repito: vale muchísimo más la vida de los seres humanos que la detención de un delincuente”, dijo el mandatario al cerrar su gira por hospitales rurales en Tlaxiaco, Oaxaca, después de 106 días.
Al referirse a la liberación de Ovidio Guzmán, hijo de El Chapo, realizada por las fuerzas federales fue la mejor decisión porque puso por encima de todo “el amor al prójimo”.
El Ejecutivo federal dijo que su gobierno apuesta por la paz y no por la guerra.
“En el Nuevo Testamento se habla de que lo más importante es la paz; no el diente por diente, ojo por ojo, porque nos quedaríamos tuertos todos, o chimuelos todos. Amor al prójimo eso es lo que tenemos que llevar a la práctica. No la confrontación, no la violencia. Sí a la paz, a la fraternidad, al amor. Nos van a criticar nuestros adversarios; no importa. No somos iguales. Nosotros vamos a el cambio por el camino de la concordia, la paz y la tranquilidad son frutos de la justicia. El mal se enfrenta con el bien, no se puede enfrentar el mal con el mal. Esto es distinto. Ya no vamos nosotros a masacrar al pueblo, no vamos nosotros a utilizar al Ejército para reprimir al pueblo de México.
“Además los soldados son pueblo uniformado que nos están ayudando mucho, están actuando con mucha responsabilidad (…) Un dirigente puede poner en riesgo su vida, pero no tiene derecho a poner en riesgo la vida de los demás. Nosotros tenemos que cuidar la vida de todos los seres humanos. ¡No a la guerra, sí a la paz!”, aseguró.
En el marco de un encuentro con médicos y enfermeras del Hospital Rural de Tlaxiaco, el primer mandatario anunció que los próximos días se equipará un nuevo nosocomio de especialidades en esta población de la mixteca oaxaqueña.
Confirmó el programa para basificar a todos los trabajadores del Sector Salud del país, empezando por los de mayor antigüedad y evitando cualquier tipo de influyentísimo.
Acompañado por el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, y los titulares de la Secretaría de Salud, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), López Obrador los comprometió a trabajar para mejorar la asistencia médica y el abasto de medicamentos.
“Para todas estas acciones se va a ampliar el presupuesto del Sector Salud en 40 mil millones de pesos”, sostuvo el jefe del Ejecutivo federal. A la población de esta región les expuso los diversos programas sociales y de bienestar de su gobierno, como son los de adultos mayores, jóvenes y becas para universitarios.
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