Desigualdades de la educación en Brasil

16 de Abril de 2024

Desigualdades de la educación en Brasil

La tragedia de la Covid no ha sido igualitaria y la educación es uno de los sectores donde las fracturas se han hecho más evidentes

Como muchos padres, Cinthia Pergola, una trabajadora social y madre soltera en Sao Paulo, ha batallado para que sus hijos sigan estudiando en el departamento que comparte con otra familia. Sin embargo, asegura que su hija de ocho años y su hijo de nueve no están aprendiendo mucho en la escuela pública en línea.

La situación tampoco es ideal en el sistema privado, confrontado al caos y la confusión, refiere la agencia francesa de noticias AFP. Pese a disponer de más recursos, la mitad de las escuelas privadas medianas y pequeñas están amenazadas de quiebra por los cierres durante la pandemia, indicó un estudio reciente.

Y han tenido que improvisar el aprendizaje a distancia, con mensajes contradictorios de las autoridades locales con los del gobierno ultraderechista de Jair Bolsonaro.

En Río de Janeiro, relata la agencia, los colegios privados se preparaban para abrir el 14 de septiembre, bajo estrictos protocolos, y las familias se abastecían de mascarillas y desinfectantes de manos para las mochilas escolares.

Pero un magistrado bloqueó el retorno, argumentando que la reapertura exclusiva de escuelas privadas violaba el principio de igualdad ante la ley. Pero esa decisión fue a su vez anulada por un tribunal de apelación apenas el miércoles por la noche, detalla AFP.

En estas discusiones legales y políticas navega la tragedia en Brasil por los decesos de Covid-19 que no ha sido igualitaria: se ha ensañado principalmente con los pobres y las minorías. Y la educación es uno de los sectores donde las fracturas de esta nación de 212 millones de habitantes se han hecho más evidentes.

En Brasil, los 48 millones de estudiantes de primaria y secundaria están divididos en dos sistemas: educación privada y pública.

Los 48 millones de estudiantes de primaria y secundaria de Brasil están básicamente divididos en dos sistemas: el de la educación privada para el 19% de familias que pueden pagarla, y la pública para el resto. El tenso proceso de reapertura iniciado en algunos colegios y escuelas ha provocado discusiones incómodas, explica la agencia AFP.

Esto ocurre en el contexto en el que Brasil, con casi 145 mil muertos, es el segundo país con mayor número de decesos por Covid-19. “Esta situación no ha sido fácil para nadie ni en ningún país, pero las circunstancias de Brasil la hacen aún más difícil”, Catarina de Almeida Santos, profesora de educación en la Universidad de Brasilia.

Y añadió a AFP, “la educación en línea para los alumnos pobres es un cuento de hadas. No tienen el equipo, conexión a internet o recursos familiares. Hay escuelas sin agua potable, sin baños, sin electricidad. Más del 40% carecen de saneamiento básico (...). Si las abres, tienes un aumento garantizado de contagios de Covid-19”.