En esta ocasión, será el Gobierno Federal quien se apriete el cinturón. 1. Sigue siendo la economía. La incertidumbre y volatilidad prevalecientes en la economía mundial siguen siendo el tema relevante del momento.
Al respecto, la Reserva Federal de los Estados Unidos ha decidido aplazar la normalización por lo menos dos semestres, con lo que las tasas de interés se mantendrían en el medio punto porcentual actual hasta el tercer trimestre del año, dado el enfoque precautorio adoptado por la Comisión de Mercados de Estados Unidos ante la debilidad del crecimiento global y el reacomodo de China en las reglas del mercado mundial.
Nuestro país, ha sostenido el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, tiene mejores condiciones que otros para enfrentar la incierta situación, gracias a que el Gobierno Federal realizó acciones de austeridad, ajuste y reestructuración por lo menos desde la reforma hacendaria de 2013, el recorte de 2015 y el esquema “base cero” adoptado para el gasto de 2016, sosteniendo la paulatina reducción del déficit público.
Gracias a estas acciones, dice Videgaray, nuestro país obtiene reconocimiento de organismos internacionales como el FMI, el Foro Económico Mundial, la OCDE y las agencias calificadoras. Las medidas macroeconómicas adoptadas han permitido evitar el incremento desproporcionado de la deuda pública y ajustado el gasto, el cual se realizó pensando que la baja del precio del petróleo sería un choque de largo plazo.
Las finanzas públicas, además, se han despetrolizado. En 2012, el 39.2% del ingreso provenía del petróleo, en tanto que ahora, esta participación fue del 19.6% en 2015, con lo que la economía nacional depende mucho menos de los ingresos petroleros. Otra medida prudencial, dice el titular de Hacienda, fue la contratación de coberturas petroleras, las cuales permitieron recibir un depósito por 6 mil 300 millones de dólares en 2015, además de que para 2016 se contrató otra cobertura para un precio de 49 dólares el barril. La previsión del Banco Mundial es que el precio internacional promedio del petróleo se ubicará en torno a los 37 dólares. Los bajos precios del petróleo impactan el crecimiento mexicano en 0.5% del PIB.
El conjunto de estas circunstancias sustenta el discurso gubernamental en el sentido de que en esta ocasión será el Gobierno Federal quien se ajuste el cinturón, evitando que el costo del ajuste gravite sobre las familias o sobre las empresas. Nuestro país, como se sostuvo en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza, en la semana que recién concluye, habrá de ser la nueva estrella de las economías emergentes.
2. CELAC: el reto, enfrentar hambre pobreza y desigualdad en democracia. La participación del Presidente Enrique Peña Nieto en la reunión de CELAC en Quito, Ecuador, puso el acento en la otra parte de la estrategia mexicana actual, la que tiene que ver con la distribución de los resultados de la recuperación del crecimiento y su proyección en los próximos años hacia una tasa por lo menos del 3.5% de manera sostenible.
El rol del Estado resulta fundamental para acometer la tarea de enfrentar el hambre, combatir la pobreza y reducir la desigualdad en los próximos años no sólo en México sino en la región latinoamericana. El reto también es hacerlo en democracia y pluralismo, en contraste con la salida fácil del populismo interventor, hoy en crisis en Venezuela y Argentina.
“Nuestras sociedades aún enfrentan graves inequidades sociales. Actualmente, por ejemplo, 20% de la población mejor remunerada en el mundo concentra 54% de los ingresos, mientras que 20% de los habitantes de menores recursos reciben sólo 4%”, dijo Peña Nieto al subrayar que las políticas públicas incluyentes, impulsadas por el Estado con responsabilidad social, contribuyen a cerrar la brecha. El eje, entonces, consiste en que las políticas públicas diseñadas e implementadas desde el Estado socialmente responsable, sean el camino para reducir el hambre, la pobreza y a desigualdad. No es tarea fácil; lograr un efecto perceptible en la reducción del nivel actual de pobreza, requiere no sólo del gasto social y las políticas públicas inclusivas, sino que hacerlo es asunto que se resuelve sobre todo con crecimiento, generar empleos y distribuir ingreso de una manera persistente y perceptible. En esa ruta están enfocadas las reformas estructurales y el proceso de implementación de las mismas.
3. Crecimiento 2.5% en 2015. Por si hicieran falta datos optimistas, el INEGI publicó el dato preliminar del crecimiento del PIB correspondiente al cuarto trimestre de 2015, que ajustado por estacionalidad, arroja una cifra ponderada del 2.5% anual. El pronóstico es que se espera un mayor dinamismo de la economía para el 2016, en el orden del 2.9%, estiman los analistas del sector privado.
Por sectores, las actividades primarias crecieron un 3% anual; el sector industrial solo 0.6% mientras que los servicios repuntaron 3.5% en el año. Ello demuestra que la demanda interna fue el principal motor ddel crecimiento de la economía en el último trimestre del año, derivado de un mayor consumo de los hogares mexicanos y de las inversiones que realizan las empresas ante la perspectiva más positiva que predomina en el país dado el aterrizaje de las reformas estructurales y los buenos fundamentos macro para sortear la incertidumbre y volatilidad mundiales.
En este contexto, los analistas del sector privado estiman que la economía interna continuará recuperándose, debido a 1) la mejor dinámica de crecimiento del mercado laboral mexicano (los empleos distribuyen ingreso y por ende, generan consumo); 2) la trayectoria descendente de la inflación en torno al 3%, que significa mayor poder adquisitivo, y 3) la recuperación que ha generado el consumo privado conforme a los reportes de ventas de Antad. Combinado con 4) el súper dólar hace más baratas y atractivas las exportaciones mexicanas, que resienten la menor actividad industrial norteamericana, a su vez afectada por el dólar muy caro. Dato tras dato se sigue que México es el país de mejor pronóstico en América Latina.
4. Agendas legislativas. En estos días, se realizaron las reuniones plenarias de los grupos parlamentarios representados en el Congreso.
Para el Grupo Parlamentario del PAN no se percibe una agenda sustantiva que les interese como no sea confrontarse con el gobierno. Irán por tanto en contra del mando único, por un sistema anticorrupción que les funcione a ellos y en contra de la reforma fiscal que han jurado echar abajo.
Para el Grupo Parlamentario del PRD, lo importante es diferenciarse y asumir la agenda social: salario mínimo, rescate de Pemex, que pague más quien más tiene, políticas públicas progresivas y Constitución de la Ciudad de México, el gran logro que traen en el bolsillo.
En el Grupo Parlamentario del PRI, destaca la agenda presidencial, nutrida de pendientes legislativos como son el paquete del “mando unico” (incluye desaparición de ayuntamientos infiltrados por el crimen organizado y redistribución de competencias); el sistema Anticorrupción en sus aspectos reglamentarios (se habla de 20 leyes entre nuevas y a reformar); la reglamentación de Disciplina Financiera de Estados y Municipios; ley de Asociaciones Público-Privadas; la creación de Zonas Económicas Especiales.
Asimismo, Ley Federal de Transparencia; Ley de Obra Pública; creación de la Fiscalía General de la República.
También, en las novedades, proseguir la lucha contra la impunidad, con la Ley de Desaparición Forzada, así como la regulación del uso terapéutico de la Marihuana, este último con amplio consenso entre los grupos parlamentarios.
Pero lo que está en el fondo de las reuniones, es el “efecto Pasarela”, provocado por el spin que le diera a la reunión el equipo mediático del Senado. 5. Numeralias y “efecto pasarela” Al convocar a la Plenaria de los Senadores, se dijo en varias columnas que sería una “pasarela” a la que asistirían quienes son considerados por la opinión pública como los posibles para el 2018. No es dicifil colegir que esto seria pasto para las llamas.
A la par, se publicó una encuesta de Consulta Mitofsky que indaga popularidades (el populómetro) y establece careos. No parece sewr sorpresa que el mejor ubicado y quien podría vencer a los opositores (el señor Lopez, Miguel Angel Mancera, Margarita Zavala de Calderón o el gobernador Moreno Valle) es el titular de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, con 23% de las preferencias, en tanto que el titular de Hacienda, Luis Videgaray, si acaso empataría y el presidente del CEN-PRI, Manlio Fabio Beltrones, se mantiene muy lejos en las preferencias. Los demás posibles apenas pintan, señalando la irrupción del gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila como un contendiente que va creciendo.
Conforme al “efecto pasarela”, un aguzado columnista como Raymundo Rivapalacio potencia al secretario de Gobernación, develando además la labor de un equipo de “spin doctors” que estarían semanalmente abonando a su potencial mediático. Si la selección presidencial fuera hoy, dice RRP, Osorio Chong sería el elegido.
Conforme al “efecto pasarela” el columnista anticipa que más adelante ira explorando los casos de otros integrantes del Gabinete con aspiración presidencial.
En el caso del PRI, varios otros columnistas asumen lo dicho con Ciro Goimez Leyva por el Presidente Nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, en el senta que seria desleal e inequitativo buscar una aspiración personal desde el CEN-PRI, interpretando que ello equivaldría a un autodescarte.
Aun falta realmente bastante tiempo para que la pasarela se convierta en una competencia entre aspirantes por el poder presidencial. Antes están los 14 procesos electorales estatales que se dirimirán el próximo 5 de junio, incluida la elección del Constituyente para la Ciudad de México.
Por ende, el inducido “efecto pasarela” es más un ejercicio de imaginación política que de creación de una opción pública competitiva para la Presidencia de la República; en el camino, pueden suceder muchas cosas, como que el Pri arrolle en las elecciones de junio y en las que habrá en 2017 en el Estado de México, Coahuila y Nayarit, lo que necesariamente habrá de cambiar el mapa politico, por ejemplo.
Lo que tenemos, entonces, es un esbozo muy general de lo que podríamos estar viendo en los próximos años, siendo ahora muy temprano para plantear una quiniela.