Foto: CuartoscuroRedacción ejecentral
La Fiscalía de EU solicitó a un juez de Washington se imponga una pena de cadena perpetua para el narcotraficante, Alfredo Beltrán Leyva quien recibirá sentencia el próximo 5 de abril.
Además pidió se multe con 10 mil millones de dólares a “El Mochombo” para privarle de los beneficios que supuestamente obtuvo del tráfico de miles de kilos de cocaína y metanfetamina entre el 2002 y 2012.
Este castigo es el mismo que había solicitado en julio del año pasado la Fiscalía, antes de que el juez Richard J. Leon aplazara la sentencia al considerar que este caso, “nada fácil”, podía demorar algunos meses más.
Los abogados del narcotraficante habían solicitado una pena de 25 años de prisión; pero en un escrito, la Fiscalía consideró el castigo de cadena perpetua como “suficiente, pero no superior a lo necesario”.
Esta acusación también consideró que cualquier pena menor as la cadena perpetua podría resultar en una deportación del capo a México al cumplir con su sentencia; lo que podría implicar el regreso del narcotraficante a su actividad criminal.
La Fiscalía apunto que durante su encarcelamiento en México, el capo continúo con sus operaciones ilícitas; por lo que consideró que Beltrán Leyva tiene poder e influencia sobre funcionarios mexicanos. Beltrán Leyva, de 46 años, fue detenido en México en enero de 2008 y extraditado a Estados Unidos en noviembre de 2014.
El proceso en contra de “El Mochombo” tomó importancia notable debido a la alianza que unió en la década de 1990 a los Beltrán Leyva y al Cártel de Sinaloa, liderado por “el Chapo” Guzmán, que fue extraditado a los Estados Unidos en enero.
Durante el proceso contra Beltrán Leyva, los fiscales mencionaron en varias ocasiones las reuniones que mantenían el acusado y “el Chapo” Guzmán para planificar el envío de grandes cantidades de cocaína a Estados Unidos. Por su parte, la defensa pidió diferenciar la droga que enviaba una organización y la otra para dictar la sentencia.
La detención en enero de 2008 de Alfredo Beltrán Leyva produjo la ruptura entre el clan familiar y el cártel de Sinaloa, encabezado por “el Chapo” e Ismael “Mayo” Zambada, a quienes los Beltrán Leyva acusaron de traición por supuestamente haber entregado a Alfredo.
Como resultado de esta ruptura se desató una violenta guerra entre carteles y el asesinato de miles de mexicanos, incluyendo políticos y numerosos policías.