¿Favorece a Hillary su triunfo en el debate?

25 de Abril de 2024

Juan Antonio Le Clercq
Juan Antonio Le Clercq

¿Favorece a Hillary su triunfo en el debate?

La elección presidencial norteamericana ha entrado en una etapa de gran incertidumbre faltando sólo mes y medio para cerrar las campañas. La moneda está en el aire y el temor a un triunfo de Trump es real, en especial septiembre ha sido sin duda un clave para sus aspiraciones y ha logrado cerrar la brecha que Clinton abrió en agosto a partir de la Convención Nacional Demócrata.

El lunes pasado por la mañana, día del primer debate presidencial, se ratificó la tendencia ascendente de Trump. De acuerdo al pronóstico del New York Times (https://www.nytimes.com/interactive/2016/upshot/presidential-polls-forecast.html), Hillary Clinton mantenía una probabilidad de 69% de alcanzar la Presidencia, ventaja aparentemente sólida pero que contrasta con el 90% que llegó a tener hacia finales de agosto. Mientras que FiveThirtyEight (https://projects.fivethirtyeight.com/2016-election-forecast/) reducía las posibilidades de Hillary a 53.6% y prácticamente advertía un empate técnico tanto en votación popular (46.3% vs 44.9%) como en los votos electorales que aporta cada estado (275.8 vs 261.9).

Estos pronósticos se realizan a partir de modelos estadísticos que agregan encuestas nacionales y estatales, por lo que permite conocer la probabilidad de triunfo tomando en cuenta el desempeño de los candidatos en cada uno de los estados, algo fundamental considerando las características particulares del sistema electoral norteamericano.

El debate nos deja con la imagen de una Hillary Clinton más agresiva y enfocada a posicionar una imagen de líder y estadista, mientras que Trump, incoherente y contradictorio por momentos, apostó fuerte por su agenda económica y a promover una imagen centrada en sí mismo, en el voluntarismo trumpeano proclamado como la única solución a los problemas de los Estados Unidos.

Hasta el martes 27 por la noche los pronósticos del New York Times mantenían prácticamente la misma tendencia del lunes: Clinton 70%, Trump 30%. FiveThirtyEight aumentaba ligeramente el margen de Clinton a 55.44 % vs 44.6 % de Trump. Sin embargo el debate se tradujo en una victoria contundente de Hillary Clinton y, de acuerdo con a la encuesta levantada por CNN, 62% de quienes observaron el debate consideraron que Clinton ganó, frente a 27% que respaldaron a Trump. Lo cual implica una diferencia abismal de 35 puntos. Lo cual, y a partir de experiencias en elecciones anteriores, expertos como Nate Silver esperan se traduzca en un impacto de entre 2 y 4 puntos a favor de Clinton.

Para Clinton es indispensable que ganar el debate le permita romper la tendencia al alza de Trump durante septiembre y aumentar su distancia en el último mes y medio de una campaña en la que se han roto todos los moldes. Requiere recuperar fuerza especialmente en estados clave como Carolina del Norte, Colorado, Florida, Minnesota, Michigan, Nevada, Ohio, Pensilvania, Virginia y Wisconsin.

Trump sabe que el triunfo se le puede escapar estos días y ha salido como fiera herida a atacar inmediatamente después de su derrota, con lo que aumenta el margen para que cometa errores. El primer dislate ha sido descalificar las condiciones del debate, el funcionamiento del micrófono y al moderador. Habrá que ver la respuesta del electorado, en un país que adora a los ganadores, ante las quejas y lamentos de un mal perdedor.

Lo que es indudable, es que haber ganado el debate será una victoria pírrica si Clinton no logra cambiar las tendencias a su favor en las próximas semanas. Aunque los pronósticos le favorecen, se arriesgaría a decidir todo el mismo día de la elección ante un rival impredecible. Hillary tiene el momento político en sus manos y aprovecharlo es una prueba para su capacidad estratégica.

*Profesor de Relaciones Internacionales y Ciencia Política, UDLAP. Director del Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia, CESIJ. Coautor del Índice Global de Impunidad.

Twitter: ja_leclercq