Sobre los trascendentes cambios en el gabinete del presidente Enrique Peña Nieto se ha escrito ya con profusión y exhaustividad en todos los medios a tal punto que no tendría más que agregar, lo cual no es óbice para que en unión de la mayoría de los mexicanos formule los mejores augurios de éxitos mayores que se vean reflejados en la precaria situación por la que atraviesa el país.
Sin embargo y aunque sea decir lo obvio procede recalcar que no bastan los simples cambios de personajes en las distintas carteras del gobierno federal para que como por encanto empiecen los melodiosos acordes de una apoteósica, fresca y original sinfonía...
Los cambios y reacomodos en las secretarías de Estado no son portales ni atajos cósmicos que hagan posible viajar instantáneamente a otras dimensiones del quehacer político-administrativo ni permiten la milagrería de abrir las aguas del mar “rojo” para sacar al pueblo de un estoicismo descarnado, crónico y súbitamente conducirlo al hedonismo inefable.
En política lo más relevante no es imponer, ni vencer, sino convencer...
Por ende lo único que satisfará a la población serán los buenos resultados y nunca, menos ahora, se pueden repetir las palabras de Tancredi (sobrino de Guissepe T. de Lampedusa) que decía “si queremos que todo siga igual, es necesario que todo cambie” y ello es de todos conocido como el “gatopardismo” terrible que evidentemente no se compagina con los compromisos ni la impronta del Sr. Lic. Peña Nieto ,pero que tampoco se merece este país que aún no puede salir del hoyo en que le enterraron la bacanal foxista y la pesadilla calderoniana.
Son ya más de tres decenios de estancamiento económico, deterioro social y aumento de la violencia criminal y por la simple repetición de las mismas políticas económicas fracasadas hay más pobreza, más informalidad y más desigualdad...
“México tiene 33 años siguiendo indicaciones y las mismas recetas del “FMI” lo que se ha traducido en una economía desvencijada por un modelo extractor de la riqueza nacional, apertura indiscriminada y ruinosa de las fronteras y puertos para las importaciones con escaso valor agregado en los procesos industriales; una política salarial canibalesca, de sacrificios humanos permanentes y el consiguiente hundimiento del mercado interno que hoy podría estar siendo un factor equilibrador en la caída de la producción y de los precios del petróleo al que por sexenios varios se volvieron adictas las finanzas públicas...”
“El fracaso educativo es total: Se invierte en educación el 7% del PIB pero el promedio de escolaridad de la “PEA” es de solo 9 años, somos un país de educación secundaria como máxima escolaridad y tal parece que no existe ni políticas públicas ni voluntad política para formar capital humano; más de siete millones de jóvenes sin trabajo y sin acceso a la educación; tres punto un millones de jóvenes con algún título profesional pero sin trabajo (Encuesta nacional de empleo) 40% de los universitarios menores de 30 años sin un trabajo remunerado y/o en la informalidad, de taxista o vendedor; el 60% de la PEA está precisamente en la zona de la informalidad y los que tienen algún empleo, tienen ingresos infames que no rebasan los seis mil pesos al mes.”
A lo anterior habrá que sumarle la tragedia (Ceesp) que en los últimos siete años “se perdieron tres millones de empleos bien pagados; de los que están contratados solo el 21.3% incluidos los universitarios tienen más de tres salarios mínimos y el 78.7% obtienen de uno a tres salarios mínimos como máximo.
Además en el 2014 se registró una caída real de ingresos en los hogares mexicanos del 3.2% y eso explica tangencialmente los dos millones más de pobres que detectó el CONEVAL...
En 2015 (CEPAL) México entró en una etapa de mayor lentitud en el comportamiento económico por baja en los ingresos petroleros, bajos salarios, bajos niveles de inversión, caída en las exportaciones (salvo las automotrices que se maquilan aquí ) déficit comercial, desplome de la “IED”, aumento del 7.9% en gasto corriente a pesar de la caída del 30.8% de los ingresos petroleros...solo crecieron las remesas del extranjero, pero la “CFE” acumuló pérdidas multimillonarias al igual que “PEMEX” al que las Calificadoras amenazan con disminuirle su capacidad de crédito (endeudamiento) ahora que lo ven inerme (ya no es una paraestatal) pero sigue siendo saqueado vía fiscal por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público que le sigue extrayendo el cien por ciento de sus utilidades totales para complementar el gasto público y le ha obligado no solo a endeudarse, sino a paralizar sus actividades de exploración y explotación para recuperar las reservas de hidrocarburos que se reducen con las exportaciones diarias (2.2 millones de barriles que siguen siendo un vital ingreso de dólares para la Hacienda Pública y que en una parte muy importante compensan la devaluación del peso).
Hay salida para este país, porque a pesar del histórico saqueo de que ha sido víctima sigue teniendo grandes riquezas, potencial y plena capacidad para redimirse, pero para que eso pase no es suficiente que solo se realicen cambios de personajes, se requieren y de manera ingente otras políticas, otras prioridades, otras agendas, otros replanteamientos, otros rumbos, un relanzamiento de la vida pública, de la política, de la armonización entre los factores de la producción y entrarle al fondo de los problemas que están agraviando al país y no quedarnos en el discurso, los adjetivos, la repetición de esquemas ni solazarse en la estéril numerología o estadísticas abstractas que la realidad hace trizas.
Hoy el 72% de los mexicanos “está profundamente insatisfecho con el sistema económico y la repetición de esquemas fallidos” por tres décadas consecutivas (fuente: Pew Research Center)
La molestia crece cuando de septiembre de 2014 a la fecha el tipo de cambio nominal aumentó de 13.2 a 17.3 pesos por dólar, un incremento nominal de casi el 30% que se tendrá que reflejar en la inflación y con ello se afectarán aún más los salarios de miseria que se imponen cupularmente, pero hoy nadie podría poner en duda que esa devaluación ya impacta las finanzas públicas vía el pago más costoso del servicio de la deuda pública externa...
Para acreditar que se busca el cambio debe aceptarse el peligro inminente que representa el haber atraído “excesivo capital de portafolio” (capitales especulativos golondrinos) que en nada benefician al país pues nunca fue utilizado para financiar proyectos productivos y de ahí el aumento artificioso de las Reservas Internacionales que Banxico ahora subasta discrecionalmente y sin rendir cuentas a nadie.-(“Pemex” aportó el 87.8% de las divisas acumuladas en esas Reservas Internacionales )
En bonos gubernamentales colocados entre extranjeros el saldo pasó de $24,000 millones de dólares en 2009 a $138 mil millones de dólares en marzo del 2015 (El Financiero) a pesar de que saben que la movilidad de capitales especulativos no generan riqueza a los países receptores y su permanente amenaza de salir intempestivamente están generando la volatilidad del tipo de cambio, devaluaciones acentuadas (no hay posibilidad de una política monetaria independiente) y han empezado a roer a precio de remate las reservas internacionales que por años se acumularon ( del 2009, $91,000 millones de dólares a Enero del 2015 $196 mil millones de dólares y mermándose con el remate de $400 millones de dólares diarios en beneficio de los especuladores bancarios principalmente, que los revenden en ventanilla con un gran margen de utilidad y/o los transfieren al extranjero sin importarles un bledo la estabilidad económica del país).
No llegó la inversión extranjera productiva ya que ante la violencia y la corrupción desbordada no hubo confianza en los inversionistas para la apertura de nuevos negocios y más empleos...El déficit del sector publico acumuló $180,693 millones de pesos a pesar del incremento de casi $100 mil millones de pesos por recaudaciones no petroleras. (Ceesp)
Si se suman los dólares por cada millón de barriles de petróleo vendido por menos dólares pero con un peso devaluado( los “remanentes de operación” de Banxico) por vender dólares antiguos a precios actuales; mas los $22 mil millones de dólares por las remesas y los $16 mil millones de dólares del turismo, todo queda neutralizado por las importaciones de gasolinas y por ese remate acelerado de las reservas internacionales que ya suman más de $10,000 millones de dólares hasta el viernes pasado y contando pero sin aminorar un ápice la devaluación.
En fin, el espacio se agota y hay aún tanto por puntualizar...Los ajustes a su gabinete deberán ser el leit-motiv del Sr. Lic. Peña Nieto para el relanzamiento de su sexenio con visión de porvenir, impulso por trascender rompiendo moldes y evitando inercias que hasta ahora hacen de México un país errabundo y a la deriva.
Ni fatalismos ni mitos.....Reacomodos y nombramientos no implican tregua para una sociedad civil molesta y desesperada!...Un fin de sexenio más fértil, más fructífero pasa necesariamente por lo que hoy para la sociedad es piedra toral, la pronta y eficaz instrumentación del “Sistema Nacional Anticorrupción”.
Quiero tan solo decir que hay salida para el país si se reconoce que la pobreza se viene reproduciendo por falta de movilidad social en los estratos menos favorecidos y que en lugar de repetir “programas asistencialistas” costosos, inoperantes, duplicados y que no han dado resultados deben cambiar para generar una política de financiamiento a la población desprotegida, incluidos los informales para que no solo se vuelvan productivos (no mendigos eternos) sino que paguen impuestos, aumenten el consumo y fortalezcan el mercado interno...( El Banco Mundial: Recomienda a México que más allá de programas individuales se dé paso a un sistema bien evaluado, coordinado y eficiente para resolver, no solo seguir postergando indefinidamente el problema de la pobreza).
Hay retos que con voluntad y transparencia podrían generar un cambio inmediato, crear empleos y estimular el mercado interno como el de dignificar (reconstruir con un programa intensivo y evaluable) las más de cien mil escuelas sin agua, sin luz, sin pisos, sin baños; también iniciar por ejemplo una campaña nacional de reforestación y de limpieza en canales, arroyos y ríos urgidos de remediación ambiental.
Por último es fundamental que si se va a recortar el gasto, lo más sano será que se adelgace el enorme aparato burocrático federal ya que ha quedado demostrado en otros lares que las políticas de ajuste con reducción del gasto y austeridad solo son remedios temporales (parches calientes para un tumor) que solo operan en la emergencia y a corto plazo, para luego incidir en la recesión, peores servicios públicos, más estancamiento y más inestabilidad social.- Lo que vale y se necesita es una Reforma Fiscal Integral donde paguen más los que más ganan, se graven las herencias y se cobren impuestos a las ganancias especulativas.- (pendiente pues el espacio se agotó).
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