“Primero fue necesario civilizar al hombre en su relación con el hombre. Ahora es necesario civilizar al hombre en su relación con la naturaleza y los animales”
Víctor Hugo
A casi cuatro años de que líderes de todo el mundo buscaran trazar un nuevo rumbo para nuestro planeta con la implementación de los 17 Objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, actualmente aquellos que tienen relación con el cuidado del medio ambiente continúan con poco avance hacia la meta propuesta.
El establecer objetivos claros con respecto a lo que debemos hacer para conservar nuestro hogar nos da un panorama de las acciones a tomar, por lo que es importante conocerlos y atenderlos; algunos de los más importantes son: la Deforestación, la contaminación de aguas, la pérdida de biodiversidad, la destrucción de ecosistemas, la extinción de las especies animales, la sobrepoblación, la degradación del suelo, el exceso de residuos inorgánicos y la contaminación del aire; éste último, tema que nos convoca el día de hoy.
Probablemente no es casualidad que el país organizador sea China, quien desde 2013 ha decidido posponer la política de imponer el crecimiento económico sobre el cuidado ambiental y ha realizado grandes esfuerzos por mejorar la calidad del aire; esta nación vivió en 2018 su año más limpio después de varios años de implementación de medidas que incluyeron el recorte de la producción industrial y restricciones al tráfico, aunque desafortunadamente el pasado febrero Pekín fue testigo de un retroceso, al vivir el mes más contaminado desde que se declaró la guerra a las concentraciones de PM2.5
De acuerdo al informe titulado Calidad del aire mundial 2018 realizado por Greenpeace y IQAir, este problema no conoce fronteras y es el responsable de alrededor de 7 millones de decesos en todo el mundo de forma anual; en dicho ranking se ubicaron 22 ciudades indias entre las más contaminadas del mundo ocupando la primera posición Delhi, capital de la India.
En dicho listado, nuestro país ocupa la posición 30 a nivel mundial y la sexta en América Latina y el Caribe, y gracias a los altos niveles de contaminación atmosférica en 2016 la Ciudad de México vivió una de sus mayores crisis; y hace tres semanas no sólo la capital del país, sino la Zona Metropolitana del Valle de México se opacó por densas nubes de humo gris, siendo la quinta vez en lo que va del 2019 que los habitantes de la CDMX necesitan ponerse a resguardo por los altos índices de contaminación del aire.
Este problema afecta significativamente el sistema respiratorio, produciendo enfermedades como el enfisema o la bronquitis crónica, y en casos más severos podría estar relacionado con el cáncer de pulmón; así mismo y de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud las partículas de PM2.5 pueden entrar al sistema cardiovascular bloqueando arterias e incrementando el riesgo de derrames cerebrales, y actualmente se están llevando a cabo investigaciones que suponen que la exposición constante a la contaminación del aire influye determinantemente en casos de demencia.
La mala calidad del aire no sólo tiene que ver con el uso excesivo de autos, o la emisión de gases invernadero, sino también con otro serio problema, al menos para nuestro país: la deforestación; ya que de acuerdo al informe Estado de los bosques del mundo 2018 de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), entre el 2001 y el 2017 México perdió aproximadamente 3.2 millones de hectáreas de bosques, o dicho de otra forma el 6% del territorio forestal.
Hoy debemos repensar la forma en la que vivimos, y comenzar a darle el peso necesario al cuidado del planeta. Los Millenials y los Centennials son generaciones que han mostrado una mayor consciencia con respecto a la imperante necesidad de conservar el único hogar que conocemos, tal es el caso de la creación del movimiento Zero Waste, el cual propone diversas reglas para reducir al máximo la producción de residuos que bien darían literalmente un respiro a la tierra.
*Analista en temas de Seguridad, Justicia, Política y Educación. *Si deseas recibir mis columnas en tu correo electrónico, te puedes suscribir a mi lista en el siguiente vínculo: https://eepurl.com/Ufj3n