Los números de satisfacción ciudadana con la democracia son tan bajos, que México ocupa el último lugar en Latinoamérica. Una de las razones de los resultados que obtuvieron las candidaturas independientes en las pasadas elecciones, es la desconfianza ciudadana de los mexicanos en las instituciones en general, pero sobre todo en los partidos políticos, los diputados, los servidores públicos, las policías, etc. Es decir una gran parte de la población no está de acuerdo con el sistema de gobierno que actualmente existe en México.
El último estudio de Latinobarómetro confirma la tesis anterior, la mayoría de los mexicanos están insatisfechos con la democracia y menos de la mitad cree que es la mejor forma de gobierno. Es más, los números de satisfacción ciudadana con la democracia son tan bajos, que México ocupa el último lugar en Latinoamérica. https://bit.ly/1lUWoa2
Esto ya había sido advertido por el Instituto Nacional Electoral (INE), quien previo a las elecciones de 2015, elaboró en conjunto con el Colegio de México, el Informe País: Sobre la Calidad de la Ciudadanía en México, con el cual buscaba obtener información para lograr uno de sus objetivos fundamentales, que es colaborar en la construcción de una democracia de ciudadanos capaces de ejercer sus derechos civiles, políticos y sociales. https://bit.ly/1LBaKtu
El Informe País reveló que la confianza de los ciudadanos en las instituciones no supera el 50%, excepto en tres casos: el ejército (62%), los maestros (56%) y las iglesias (55%); pero la confianza en los partidos políticos y los diputados está por debajo de 20%, y la confianza en la autoridad electoral es de 34%.
En el caso de las tres últimas instituciones mencionadas podemos observar que sus índices de aceptación son sumamente bajos, por ende la tarea de la construcción de una democracia resulta colosal, ya que sí solamente 3.4 de cada diez mexicanos confía en el árbitro del partido y solo dos en los jugadores, podemos adivinar cuál será el marcador en los futuros encuentros, de hecho el pasado 7 de junio ya tuvimos una muestra.
Al igual que la encuesta de Latinobarómetro, en su informe el INE también cuestionó la preferencia de las personas hacia la democracia, los resultados igualmente resultaron preocupantes: a un 18% de los entrevistados le da lo mismo un sistema democrático que uno no democrático, y un 23% opina que podría preferir un gobierno autoritario de mano dura que uno democrático. Es decir solo un 53% asegura que la democracia es preferible a cualquier otro sistema de gobierno.
Con respecto a las diferencias entre estas opiniones, el estudio encontró que a medida que los ciudadanos cuentan con más educación o tienen mayores ingresos, tienden a preferir de manera significativa un sistema democrático sobre uno autoritario. Asimismo dieron a conocer que la mayoría de los mexicanos percibe a la democracia como un sistema donde muchos participan y pocos ganan.
En comparación con el estudio de Latinobarómetro que recogió sus muestras un año después que el INE, los resultados fueron muy distintos, pues apenas el 19% de los mexicanos está satisfecho con el funcionamiento de la democracia en el país, muy por debajo del 37% promedio en América Latina y el Caribe.
De acuerdo con Latinobarómetro que cumple 20 años realizando este informe en 18 países de AL, los latinoamericanos son los más insatisfechos a nivel global con su democracia, porque “tienen altas expectativas y crecientes grados de empoderamiento y opiniones cada vez más críticas”, no obstante, el propio organismo reconoce que es difícil comparar con las otras regiones del mundo, porque se viven contextos muy diferentes en todos los ámbitos: económicos, educativos, sociales, religiosos…
Entonces, para darse una mejor idea de cómo mide Latinobarómetro los niveles de satisfacción, valdría la pena mencionar algunos de sus indicadores de evaluación para su estudio que son: se mide según la posición de cada cual en la sociedad. Los países que están mejor posicionados y que tienen una menor brecha social, tienen más aprecio por la democracia; se evalúa por las posibilidades que entrega para avanzar en la escala socioeconómica, generar movilidad social; se valora por cuánta democracia se percibe. Es decir la suma de los derechos políticos y sociales disponibles a toda la población.
A lo largo de estos 20 años, la democracia en nuestro país ha avanzado de forma muy significativa, se han presentado las alternancias del 2000 y del 2012 en el ejecutivo, un considerable avance en la paridad de género en las candidaturas y ahora las candidaturas ciudadanas.
Pero aun así los mexicanos no nos sentimos representados, ni satisfechos con los servidores públicos, legisladores y gobernantes de todos los niveles. Todo indica que se debe a la enorme desigualdad económica y social que existe en México, el discreto crecimiento de la economía mexicana a pesar de las recientes reformas y las ultimas violaciones a los derechos humanos cometidas por algunas autoridades.
*Analista en temas de Seguridad, Educación y Justicia simon@inprincipioeratverbum.com.mx @simonvargasa facebook.com/simonvargasa Linkedin: simón-vargas-aguilar www.inprincipioeratverbum.com.mx *Si deseas recibir mis columnas en tu correo electrónico, te puedes suscribir a mi lista en el siguiente vínculo: https://eepurl.com/Ufj3n