Los inversionistas están muy nerviosos por lo que pueda pasar con la Reforma Energética. Hace unos días le giraron una invitación a Octavio Romero Oropeza, quien será el próximo director de Pemex, para ir a Nueva York y hablar con los inversionistas, algo que ayudaría a calmar esos nervios. Pero don Octavio dijo que gracias, pero no. La razón de fondo, dicen los que saben, es que él no sabe ni entiende ni le interesan los mercados, y dice que ese no será su trabajo, sino del próximo secretario de Hacienda, Carlos Urzúa.