Todo el grupo que responde al ingeniero José María Riobóo, asesor del presidente electo Andrés Manuel López Obrador desde hace más de 15 años, está defendiendo a como dé lugar que el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se levante en Santa Lucía. Sergio Samaniego, quien junto con él elaboró el proyecto en la base militar, dice que pueden realizarse “dobles simultáneas” con el actual aeropuerto Benito Juárez. Más allá de la inviabilidad operativa, dicen los que saben que el planteamiento incurre en una ilegalidad porque dejaría a unas aerolíneas en la Ciudad de México y otras en Santa Lucía, por la falta de equidad. La única posibilidad jurídica es que Santa Lucía se dejara sólo para operaciones internacionales, con lo que se regresa al diagnóstico técnico del alto costo que implicaría tener ahí una segunda terminal que, además, sería una solución de corto plazo. Pero don José María no cesa en su lucha, aunque, agregan los que saben, cada vez se queda más solo dentro del equipo de López Obrador.
20 de Abril de 2024