En la bancada del Partido Verde en el Senado hay un murmullo que pinta para convertirse en realidad en poco tiempo: la salida de Alejandra Lagunes. Dicen los que saben que doña Alejandra, que fue imposición del expresidente Enrique Peña Nieto a los verdes, está considerando solicitar licencia para atender un problema de salud. Oséase, a lo mejor cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador dé a conocer algunos de los secretos de doña Alejandra cuando mandaba a sus anchas en Los Pinos, los reciba fuera del Senado.