Los chinitos están mirando

16 de Abril de 2024

Javier Alatorre

Los chinitos están mirando

JAVIER ALATORRE

“Uy, a ver si no quieren la revancha”, me dijo Doña Jose mientras recorría los estantes del súper chino El Oriental en División del Norte.

Mientras veíamos las latas y otros productos chinos, la señora sonorense me contó historias tremendas de discriminación y maltrato a los migrantes chinos en México.

Una sangrienta pesadilla que duró más de 40 años y costó la vida a mujeres, hombres y jóvenes chinos que migraron a México a finales del siglo XIX. Trataban de cruzar a Estados Unidos. Llegaban en barcos enormes por Mazatlán y Guaymas. Se quedaron a construir ferrocarriles y poner pequeños tendajones que resultaban muy exitosos. Jóvenes inmigrantes chinos que cruzaron a Estados Unidos murieron en condiciones de esclavitud colocando rieles, hasta que Estados Unidos consideró que eran una amenaza para su economía y decidió echarlos. Miles más aguantaron maltratos en Baja California y otros estados del Norte. Enfrentareon la creciente xenofobia.

Los prósperos negocios de los orientales eran saqueados y miles de chinos fueron humillados, torturados y asesinados en Coahuila, Nuevo León, Durango, Sonora y Sinaloa. Una masacre respaldada por el gobierno y grupos racistas integrados en comités antichinos. Miles murieron abandonados en las Islas Marías, otros explotados en las minas de carbón y arrojados a fosas comunes.

El presidente Álvaro Obregón fue aún más lejos y prohibió a los chinos instalar negocios, casarse con mexicanos o entrar a restaurantes. A pesar de ello, los chinos llegaban a México desafiando a las ligas proraza, una pesadilla que terminó en 1944. Siete décadas después, los chinos regresaron a la discusión. El gobierno federal canceló en enero de 2015 el proyecto Dragón Mart con 20 naves comerciales, tres mil locales y 722 viviendas en la Riviera Maya. Voceros de presidencia argumentaron que la clausura evitaría daños al medio ambiente e impusieron una multa de 22 millones de pesos.

En 2014, la compañía China Beijing Sansong quería construir un complejo de 22 mil habitaciones junto a la zona protegida de Cabo Pulmo en BCS. La inversión por tres mil 600 millones de dólares se canceló.

En aquel año el gobierno federal canceló la inversión china en el proyecto del tren bala México-Querétaro para “dar más trasparencia al asunto.

En la panza del proyecto estaba el polémico Grupo Higa con su estela de escándalos tan costosos en la popularidad del gobierno federal. El secretario de comunicaciones negó compadrazgo y corrupción en el proyecto que costaría 59 mil millones de pesos. Pagaron 16 millones de dólares a China Railway para cancelar el proyecto y tan tán. Pese a la incertidumbre que generan las declaraciones de Trump, hacer negocios en México es un asunto muy atractivo en el mundo, pues tiene tratados de libre comercio con 45 países y es miembro del moribundo Tratado de Asociación Transpacífico que Estados Unidos abandona, según anunció Trump. Los acontecimientos en Washington podrían revitalizar el interés de China. Hoy el comercio es muy desigual. A pesar de los enormes aranceles, los chinos venden 12 veces más de lo que enviamos. Según la Secretaría de Economía, el déficit comercial con China es de 50 mil millones de dólares al año. ”No hay espacio que no se llene”, dijo el Secretario de Economía Ildefonso Guajardo, al conocer la salida de Estados Unidos del TTP.

A partir del próximo 20 de enero sabremos más de las decisiones de Donald Trump sobre el comercio con México. Según el secretario de Hacienda, Jose Antonio Meade, el intercambio de mercancías con Estados Unidos significa un millón de dólares por minuto, pero México puede voltear a otros horizontes. Los chinos mientras tanto, siguen mirando. Conductor del noticiario estelar de Televisión Azteca. @Javier_Alatorre