El pasado martes dio inicio una nueva legislatura en el Congreso de la Unión y con ella, una nueva oportunidad para revitalizar la democracia mexicana y seguir demostrando que en la pluralidad es posible dar buenos resultados.
La capacidad para acordar y aprobar lo más conveniente para el país se apreciará en la discusión de proyectos que constituirán la Segunda Generación de Reformas Transformadoras, integrada por las reformas del campo, seguridad social, Sistema Nacional Anticorrupción, disciplina financiera de las entidades federativas, ley del registro de población, transparencia, agua, seguridad pública y ley orgánica del CONEVAL.
Se trata de pendientes que reflejan la importancia de lo que acontecerá en las cámaras legislativas del Congreso de la Unión durante los siguientes tres años, sin perder de vista que también se encuentra en el proceso legislativo la reforma política del Distrito Federal, así como la ley secundaria en materia de desaparición forzada.
Asimismo, la creación de las Zonas Económicas Especiales en el sureste mexicano será la máxima prioridad del Congreso de la Unión, en aras de generar mayores oportunidades de desarrollo en las entidades que presentan mayores índices de pobreza y que merecen un tratamiento diferenciado para incentivar su progreso.
Y qué decir del tema con que serán recibidos los nuevos diputados federales y que lo constituye la propuesta que realizará el Poder Ejecutivo Federal de paquete económico para el año entrante, el cual, con base en lo expresado por el secretario de Hacienda, Dr. Luis Videgaray Caso, podría incluir ajustes en materia fiscal que modifiquen lo aprobado en 2013 a través de la reforma hacendaria-social impulsada por el propio presidente Enrique Peña Nieto.
En el aspecto electoral también hay pendientes, pues el reciente proceso vivido sacó a la luz la sobrecarga de trabajo que enfrenta el Instituto Nacional Electoral (INE), desgaste que no es el deseable en una institución de la importancia que representa el árbitro electoral de nuestro país. De ahí que una reforma en este sentido sea deseable y urgente.
La iniciativa del Presidente de la República que busca garantizar la seguridad pública a través del Mando Único Policial Estatal, permanece en análisis en comisiones del Senado de la República, tratándose de un tema que preocupa a la población y cuya urgencia es evidente para seguir avanzando en la lucha contra la delincuencia y la impunidad.
Al respeto, el 18 de junio de 2016 se instaura a plenitud el Sistema de Justicia Penal Acusatorio en todo el territorio nacional, ante lo cual la Cámara de Diputados deberá atender los requerimientos presupuestales de las entidades federativas para cumplir con esta meta.
La LXIII Legislatura tendrá la gran responsabilidad de coadyuvar con el Poder Ejecutivo Federal en la implementación de las reformas transformadoras y la creación de nuevas, encomienda nada sencilla que requerirá capacidad, talento, compromiso y visión por parte de los coordinadores parlamentarios y de cada uno de los legisladores federales.