El exejecutivo de Odebrecht para América Latina y Angola, Luiz Antonio Mameri, el hombre encargado de autorizar o rechazar los pagos de sobornos, fue otro de los personajes que señaló a Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, como uno de los funcionarios que recibieron “propinas” de la firma brasileña a cambio de facilitar contratos de obra. Mameri se presentó a declarar el 13 de diciembre de 2016 en la sede de la Procuraduría General de la República (PGR), en Sao Paulo, Brasil, donde explicó a los fiscales brasileños cómo y porqué autorizó depósitos a Lozoya Austin, cuando era miembro del equipo de campaña de Enrique Peña Nieto, en 2012, y posteriormente, cuando asumió la cartera de Petróleos Mexicanos. De acuerdo con su testimonio, él fue encargado de avalar los pagos a cambio de la ayuda para obtener contratos de la petrolera, además hurgó entre sus archivos electrónicos para encontrar algunos los registros de las transferencias hechas a las cuentas de dos empresas: Latin America Asia Capital Holding y Zecapan, offshores que ya habían sido mencionadas por otro colaborador de la justicia brasileña: Luis de Meneses Weyll, el ex director de Odebrecht en México. La investigación incluye documentos que describen operaciones bancarias a cuentas que dio Emilio Lozoya para el pago de sobornos, los cuales coinciden con los testimonios de ex directivos de Odebrecht.
El todopoderoso de los sobornos
El testigo es un personaje que ocupa uno de los más altos rangos en la red de hombres de confianza de Marcelo Odebrecht, presidente y propietario de la empresa que lleva su apellido, y que se ha visto envuelta en un escándalo de corrupción por ofrecer pagos millonarios a presidentes, ministros, diputados e integrantes de la clase política de una decena de países del continente y de la África de habla portuguesa, a cambio de contratos para el consorcio constructor.
https://www.youtube.com/watch?v=KJImN7UWCHU Una nueva entrega de los videos difundidos por Quinto Elemento Lab, donde se muestran las declaraciones juradas que constan en el expediente del proceso y las investigaciones del caso conocido como Lava Jato, y cuyo testimonio está en poder del Tribunal Superior de Justicia de Brasil. Los fiscales brasileños investigan la trama de corrupción en cuyo centro se encuentran el consorcio constructor Odebrecht y políticos de América Latina, comenzando por Inazio Lula Da Silva y decenas de presidentes, ministros, diputados e integrantes de la clase política de una decena de países del continente y de la África de habla portuguesa. Desde 2008, luego de ir ascendiendo en el escalafón de la empresa, a Mameri se le asignó un poder casi ilimitado: autorizar o rechazar las peticiones para entregar dinero negro. Cuando un director de Odebrecht consideraba necesario financiar ilegalmente alguna campaña electoral o entregar millones a cambio de la obtención de enormes contratos de obra pública, debían tocar la puerta de Mameri. (Foto: Especial). DA