Muertes y daños en Sinaloa eran evitables

19 de Abril de 2024

Muertes y daños en Sinaloa eran evitables

El riesgo para Culiacán era inminente y eso lo supieron las autoridades estatales y municipales con 12 horas de antelación, pero no activaron los protocolos de protección para la población

En Culiacán, Sinaloa, el Sistema de Alerta Temprana para Ciclones Tropicales (SIAT CT) falló. El Instituto Estatal de Protección Civil de la entidad supo con más de 12 horas de anticipación que la población del centro del estado debía estar lista para desalojar en cualquier momento ante la peligrosidad de la Depresión Tropical 19-E, pero no activó los protocolos que le ordena la ley.

Tampoco cumplieron con su responsabilidad preventiva ni las autoridades federales, estatales y municipales, al menos con lo que establece el Sistema Nacional de Protección Civil. Por ahora el saldo es de cinco personas muertas, dos desaparecidas y más de dos mil 500 personas alojadas en albergues en el norte y centro de la entidad.

Esto revela la revisión que hizo ejecentral, del minuto a minuto, de las acciones de Protección Civil federal, estatal y municipal; así como el gobernador del estado, la Conagua y los cuerpos de auxilio, para la prevención y atención al desastre.

Ni las redes atendieron

El 19 de septiembre a las 18:37 horas, el Instituto Estatal de Protección Civil sinaloense informó por medio de sus redes sociales que el SIAT, el cual depende del Sistema Nacional de Protección Civil, mantenía la “Alerta Amarilla para el Centro y Norte deMedidas-alerta-amarilla-3-WEB Sinaloa ante la presencia en el Mar de Cortés de la Depresión Tropical DIECINUEVE-E”, lo que implicaba a la población “estar preparada para una posible evacuación”.

Entre las medidas que ordenaba la alerta se encontraba la valoración de la posibilidad de instalar los consejos estatales y municipales de Protección Civil, y sobre todo, la preparación de los posibles refugios temporales. Además de reforzar las campañas en los medios de comunicación masiva para alertar a la población, como emitir boletines cada seis horas. Nada de esto sucedió.

A pesar que los mapas meteorológicos mostraban cómo crecía la depresión tropical, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), encargada de alertar a las autoridades sobre las condiciones climatológicas, reportó hasta las 12:30 horas del 20 de septiembre que se preveían tormentas intensas desde Culiacán hasta Guamúchil que generarían inundaciones en zonas bajas, saturación de drenajes en sitios urbanos, así como posibles deslaves, desbordamientos de ríos y arroyos. A esa misma hora, Protección Civil de Sinaloa lanzó un “atento aviso”, por medio de su perfil de Facebook, a la población de Culiacán, para que permaneciera en un lugar seguro, “en caso de ser necesario evacuar”. Ya era muy tarde.

El Consejo Municipal de Protección Civil sesionó cuando el desastre ya se había consumado. Entonces más de 100 colonias y seis sindicaturas de Culiacán ya se encontraban anegadas de agua. Aunque desde la mañana del 20 de septiembre, cuando ya habían transcurrido varias horas de lluvia, sin inundaciones aún, por medio de Facebook los habitantes de Culiacán preguntaban si se suspenderían las clases. No obtuvieron respuesta. Según la autoridad local el fallo en la prevención ocurrió porque la Depresión Tropical 19-E registró “movimientos inesperados” que arrastraron a las fuertes lluvias al centro de Sinaloa.

“Antes, cuando había huracanes y la radio era el único medio de llegar a toda la población rural y urbana había mayor eficiencia. Hoy con tanta tecnología no fueron capaces de ser eficaces en su trabajo, no escuché ningún comunicado por televisión o radio que son los medios de comunicación masiva. No todos usan Facebook o redes sociales, señores. Pérdidas materiales y sobre todo humanas se habrían evitado. Fin del comunicado. Atentamente ciudadana afectada por las inundaciones”, escribió la usuaria Patricia Villegas en respuesta al aviso de Protección Civil.

Así como ella miles de sinaloenses fueron afectados por la Depresión Tropical, tanto, que la Secretaría de Gobernación declaró estado de emergencia en 11 municipios de Sinaloa.