Para los que no me conocen, mi nombre es Narciso Guisote y soy un genio. De esos no muy reconocidos porque no tuve la fortuna de estudiar en sus escuelas bien elegantiosas y esas cosas, pero es bien cierto, desde chico mi’amá se dio cuenta de que soy brillante.
Por eso se los vengo a decir de una vez —con tiempo— para que luego no me estén difamando y me quieran voltear la tortilla: fíjensen bien lo que escribo porque luego López Obrador y los morenas me lo fusilan o como dicen popularmente, me lo soplan, y luego a él le andan aplaudiendo y de uno ni se acuerdan ni le cuentan las pulgas.
A los que me siguen se los dejo claro y a los que apenas me están conociendo, se los aclaro: Yo dije antes que nadie, que nos iban a llevar al desPEÑAdero. ¿entienden? ¿De Peña? ¿De caerse? ¿De pena? ¿De despeinarse? ¿De que nos lleva la chiflada? ¿De ventas? ¿Del neoliberalismo? ¿Se acuerdan? Jajajajaja, fui genial. Simplemente, genial…
Oh, Dios, pocas propuestas políticas tan buenas, tan fregonas y tan robadas como las mías. Por eso, vengo a dejar constancia de una buena vez y voz por todas. Pero no todo es malo. Lo bueno es que hay esperanza. La gente está despertando. Y es de sabios cambiar de opinión. Y más vale tarde, que nunca. Y a río revuelto, no entran piedras. Y agua que no has de beber, cate de mi corazón. Y al buen entendedor, pocas botellas. Y botellita de jerez, todo lo que me digas será al revés… ¿A qué venía tanto refrán y reflexión? A que YO soy la solución para el 2018. ¿Cómo que todavía falta mucho? ¿Qué no saben que los tiempos se han acortado por el internet?
Pero para que no digan que todo se queda en acusaciones de plagio, aquí mis propuestas. ANOTENLAS en cualquier papel que tengan a la mano —aunque sea el del baño— para que lo guarden y vean después cómo me las coaxionan:
1.- El precio de la gasolina esta bien alto y eso hace que suba el precio del boleto del metro. Y eso pega en el bolsillo de la gente porque usamos mucho ese medio de transporte. Además, quiero generar especial descuento de consumo para los que somos estudiantes, filósofos y creadores de arte. ¿Qué de donde se paga la infraestructura y servicios de lo que yo le baje al precio? ¿Qué en México el precio está por debajo de otros países? Pues eso es problema de los que hablen inglés, del FMI ó FBI ó como le llamen, ¿están de acuerdo? ¡Nosotros a lo nuestro y ellos a lo suyo!
2.- Subamos los salarios. Es lo justo. ¿Cómo que eso generaría inflación? Enton’s sólo suban los bajitos, de los que ganamos poco; el que se conoce como mínimo, pues. ¿Qué eso hace que por ley automáticamente se ajusten todos los salarios de trabajadores inscritos en el IMSS? ¡Pues yo qué sé, denlos de baja, o violen la ley que para eso están, ¿qué no?!
3.- Bajemos los impuestos: no es justo que los cobren, la mera verdad. En especial a la bebida y cigarros. Por eso crece el consumo de la mota, la tatacha, la juana punchina, el porro: porque sale mas baras que unos marlboro con un aguardiente en garrafa de plástico, ¿eh? Y lo mismo hacen.
4.- Junto con eso, y entrados en el tema, mejoremos la economía familiar. O sea, que se bajen los precios de las cosas que se consumen de primera necesidad: nada que le anden subiendo al chesco ni a las papitas ni al gansito. Parece que le jalan el cuello a quien lleva el ingreso a la casa: que no coman eso, que mejor coman huevo y frijoles y fruta. ¿Tienen idea de cuánto cuesta una papaya tapatía?
5.- Conciliemos grupos de interés por el bien de México. Por ejemplo, el otro día unas feministas se metieron a un baño a romper los mingitorios porque son chauvinistas. Y ¿pues sí, no? Pero ellas no pesaron en los ecologistas. Esos se enojaron porque cuando uno hace en el miadero, se ahorra agua. Enton’s estaban a punto de darse de güamazos y fue cuando intervine. Salvé la situación. En serio. ¿Cómo lo saben? ¡Pues no han leído que se mataran entre ellos!
Por último, hay que pensar que en México nos estamos haciendo viejos. El tronco ronco de la pirámide cóncava de población se está invirtiendo (pa’ que vean que sé de matemáticas) y al rato, no habrá panteones suficientes para tanto mexicano tan ancho y gordo (es problema genético, ¿eh?). Por eso propongo también, inseminación gratuita pagada por el gobierno, para todos los muertitos. ¿Cremación? Yaaaaah, esto es serio, ¡no me albureen!