El Palace de Madrid es uno de los grandes hoteles situado a un costado de La Castellana, frente a Las Cortes y, para los mexicanos, a un par de cuadras de la Embajada de México. Es el hotel donde siempre llegaba
Jorge Luis Borges a tomar café, y donde se vio hace unos días a dos expresidentes charlando cálidamente:
Carlos Salinas, que ya tiene residencia oficial en Londres, y
Enrique Peña Nieto, que la tiene en Ixtapan de la Sal. Merodeando por el hotel también estaba
Napoleón Gómez Urrutia, el senador minero, pero no estaban juntos, y menos revueltos.