Beto tiene la panza más inflada que un político corrupto y un reflujo amargo que le inicio en el 2013.
Sus problemas ácido pépticos, comenzaron hace 4 años y va de coraje en coraje desde entonces.
Beto forma parte del 86% de ciudadanos enojados según la medición del humor social con la que cerro 2016. (NODO dic 2016).
El enojo de Beto es muy sencillo. Hace 4 años le prometieron que en la vida le iría mejor. Era el “Beto Moment”. Busco una hipoteca, para librarse del pago de una renta que ya no puede cubrir. Pero no le dieron nada, ni un centavo de préstamo.
Le dijeron que bajaría el precio del gas, de la luz y la gasolina y que sería muy feliz. Pero hoy tiene más deudas y sigue con el mismo salario desde hace 15 años.
Me reuní con Beto y otros amigos antes del gasolinazo.
Estaba de buenas, muy entusiasmado. "-ahora sí, ya. A chingar a su madre los corajes” me dijo, chiquiteando un caballito de tequila. Me pidió el coche prestado para ir a Zirahuén, un lago muy bonito en Michoacán. Se iría con Consuelo su mujer, sus hijos y la familia de su cuñado. Viajarían todos en dos carros con todo lo necesario para la cena de fin de año y Reyes. Beto el amargado, estaba contento. Con discreción nos dijo que el sexo comienza a sustituir las eternas discusiones con su mujer. No abundó más, pero mantuvo la ceja arqueada durante un buen rato en la conversación del traguito de fin de año.
Dos días antes del viaje a Zirahuen Beto cancelo todo. estaba furioso.
Me busco para decirme entre mentadas de madre y casi como un reclamo, que subiría la gasolina.
Todavía hoy no le queda claro cuánto ni cómo pagará por moverse en automóvil, pero le volvió el reflujo y la gastritis aguda por estrés.
Su cuñado, el de Puebla, también cancelo el viaje al lago michoacano.
Beto investigo que Guerrero, Puebla, Jalisco y la Ciudad de México recibirán el primer sablazo con los aumentos de la gasolina. La magna a 16.59 pesos y la premium a 18.36 el litro. Y así seguirán subiendo en las 90 regiones en las que hacienda dividió al país. Beto me colgó el teléfono cuando le dije que Hacienda fijará los precios máximos semanalmente el mes próximo y después del 18 de febrero el ajuste será cada 24 horas. "-subirán diario” me grito antes de aventar el celular.
Me buscó un poco más calmado para pedirme que lo acompañara a comprar un gelecito de riopan. En el camino a la farmacia me dijo que en diciembre de 2012 fue el primer gasolinazo de esta administración. Después de un rápido sacacuentas concluyó que en cuatro años la gasolina premium subió 7 pesos el litro y la magna 6 pesos. "- de puro impuesto” me dijo refiriéndose a los IEPS, el impuesto especial sobre producción y servicios, que solo este año, según Hacienda, le dejo al gobierno más de 264 mil millones de pesos. Discutimos los pobres argumentos de la Autoridad Federal ante el gasolinazo. El titular de Hacienda dijo el pasado 14 de diciembre que el precio de la gasolina a veces subirá y otras bajará dependiendo de los costos. "-si claro, sobre todo si existe un solo proveedor de gasolina” me dijo Beto con ironía y conteniendo un eructo.
Le comente entonces que según el titular de la SEMARNAT la medida es eficiente para combatir el cambio climático y para tener una economía baja en carbono. Y que, además, impulsará el uso de vehículos híbridos. Beto apretó la boca y se agarro la panza cada ves más distendida por el coraje. "- si güey, voy corriendo por un Híbrido pasando Reyes” me contesto. Los precios de lista de los híbridos que promueve la medida, van de un sencillo Honda de 361 mil 900 pesos. O el modelo híbrido de la Volkswagen de un millón 87 mil 500 pesos, hasta el que oferta la BMW a la venta en 2 millones 501 mil 900 pesos. Son precios de lista de 2016 previos a la devaluación de nuestra moneda frente al dólar. Lo vi tan amarillo que decidí no sacar el tema de los preciso del gas. El resto del camino a la botica guardamos silencio. Mi amigo recibió el año triste y muy enojado.