El oso y el puercoespín

19 de Abril de 2024

Luis M Cruz
Luis M Cruz

El oso y el puercoespín

1. La elección de Donald Trump a la presidencia norteamericana puso en negro los futuros de la economía mexicana. La moneda ha sido la que en mayor medida registra la perspectiva negativa ante lo que se considera habrá de ser un periodo de revisión a fondo de la relación bilateral y trilateral, en la que la peor parte apunta a llevarla nuestro país. Por lo menos en dos pesos se ha depreciado nuestra moneda tan sólo por esa posibilidad, situándose la prospectiva de Barclays en 20.50 pesos por dólar para el final del año.

La Bolsa Mexicana también ha resentido el nerviosismo situando la marca en torno a los 45 mil puntos, sobre todo después que el Banco de México elevó la tasa de interés en 50 puntos base, colocando la referencia en 5.25% con lo que la tasa interbancaria llegará por lo menos al 6%. Puestos a esperar a que los planteamientos de campaña del magnate se moderen en el programa de gobierno, el titular de Banxico ha cambiado su perspectiva de un huracán clase 5, a uno de menor intensidad.

2. No obstante, las cosas apuntan a no ser tan sencillas. Habrá cambios, pues de cualquier forma la vigencia del TLCAN concluye el 7 de agosto de 2017 si no es renovado por las partes, por lo que fue señalada esta fecha como un “deadline” para la renegociación. Ciertamente, algunas partes medulares del Tratado habían sido ya revisadas de cara al Acuerdo Transpacífico (TPP), mismas que, al ser factible su abandono, pudieran ser trasladadas a un NAFTA revisado o modernizado.

3. Por otra parte, el perfil de derecha radical que está adoptando el equipo de gobierno de la administración Trump, con Reince Priebus, presidente del Comité Nacional Republicano en el ala oeste de la Casa Blanca; el supremacista Stephen Bannon como jefe de Estrategia; Mike Pence como vicepresidente y responsable del equipo de transición; así como la posible incorporación de Mitt Romney a la Secretaría de Estado; Rudolph Giuliani, ex alcalde de Nueva York como Secretario de Seguridad Interior; las designaciones confirmadas al senador ultraconservador Jeff Sessions como Fiscal General, al general retirado Michael Flynn como Asesor de Seguridad Nacional y al representante Mike Pompeo como jefe de la CIA, además del rol de sus hijos y familiares, sobre todo Ivanka y su yerno Jared Kushner, poderoso consejero presidencial quizá sin cargo formal; todo apunta a un gobierno ultraconservador que habrá de ejercer gran presión sobre México. 4. Buscarán no solo sólo estrechar el comercio, con la revisión del TLC y la imposición de aranceles, sino también apretar la migración, con los dolorosos temas del Muro (que México tendrá que reembolsar “por las buenas o las malas” aludiendo al bloqueo de remesas o elevación de tarifas) y la deportación de 2 a 3 millones de ilegales “indeseables”; en el narcotráfico, en donde se suponen nexos de políticos y cárteles, así como en el combate a la corrupción e impunidad, en los que el propio Trump se siente ofendido al haber perdido negocios y juicios en nuestro país atribuidos a la profunda corrupción tanto del sistema político como de la justicia mexicana. 5. Un gabinete ultraconservador habrá de significar, sin duda, que aquella alegoría del ex embajador Jeffrey Davidoff sobre la relación asimétrica entre México y Estados Unidos, “el Oso y el Puercoespín”, habrá de arrancar el 20 de enero con un oso bramante, típico en un negociante nato y abusivo como es Donald Trump, quien sabe que intimidar en una negociación, siendo el fuerte, le garantiza la parte del león. Haría falta entonces que nuestro país sea un puercoespín puntilloso para enfrentar el desarreglo proteccionista y aislacionista que está planeando Trump porque caro, de cualquier forma, ya lo estamos pagando.