Asai: Verdadero Kaiseki en México

25 de Abril de 2024

Ana Saldaña

Asai: Verdadero Kaiseki en México

Foto Ana Saldaña

Todavía recuerdo la primera experiencia Kaiseki que viví como si fuera ayer. En mi primer viaje a Japón, pernocté una noche en una casa de huéspedes tradicional japonesa conocida como “ryokan” de nombre Tamahan en la hermosa ciudad de Kioto. El lugar te trasportaba al Japón de antaño, con su arquitectura, estética, tradiciones, ceremonias y aromas.

Ahí aprendí que la comida “kaiseki” es todo un arte en donde los ingredientes, estaciones, colores, texturas, preparaciones y presentación lo son todo. La experiencia se caracteriza por una serie de platillos en el que cada tiempo es preparado con los mejores ingredientes de la temporada y en los que cada plato muestra el dominio del cocinero de las distintas técnicas de cocción, ofreciéndole al cliente una variada degustación de sabores y texturas. Cada plato es diferente.

Foto Ana Saldaña

Por eso cuando escuché que había abierto un nuevo lugar en Polanco para probar la cocina kaiseki no dudé en hacer mi reserva en Asai. Sin duda para muchos cuando pensamos en comida japonesa inmediatamente pensamos en sushi, sin embargo, esto es solo la punta del iceberg en lo que a esta gastronomía se refiere. El experimentar un kaiseki ofrece una oportunidad única de explorar, descubrir, pero sobre todo ampliar tus horizontes culinarios. Si lo que quieres es sushi o pedir a la carta, olvídalo. A Asai vienes a ponerte en las manos del chef y dejarte llevar por lo que lo inspiró ese día. En el lugar tienes la opción de escoger entre tres menús y la única diferencia es que mientras más caro sea el menú, más platos incluye.

Foto Ana Saldaña

Al llegar al lugar, uno pasa por una pequeña puerta típica japonesa y lo primero que ve uno es una amplia barra de madera y con 8 lugares. También hay unas mesas. Aunque si uno va a experimentar esta cocina, no hay nada mejor que hacerlo en la barra y poder disfrutar la experiencia interactuando con el Chef del lugar, Yasuo Asai, quien por algún tiempo fue Chef en Yoshimi. Ahora Yasuo ha emprendido un nuevo camino abriendo este pequeño e íntimo lugar que te transporta por un rato a Japón.

Foto Ana Saldaña

La experiencia resultó toda una delicia. El menú se divide en distintos tiempos con pequeñas porciones. Cada platillo estaba perfectamente presentado con vajillas hermosas que parecen japonesas, pero todas fueron todas elaboradas en México. Para empezar llegó una pequeña entrada de gelatina con erizo, hueva de salmón, camote, champiñón shimeji, okura y zanahoria. El erizo estaba levemente cocinado al vapor y estaba fenomenal. Después vino una preciosa base de talavera con omelette dulce, bacalao negro en salsa miso, una crujiente hueva de arenque, atún y col china con almeja. Cada sabor estaba perfectamente balanceado, dejaban brillar al ingrediente, pero a su vez lo complementaban para abrir su sabor. Le siguió un ligero y aromático caldo con mochi de verduras, una pequeña porción de sashimi que estaba fresquísimo, un tazón con un huachinango al vapor con cangrejo y clara de huevo, costilla de res con langosta y wasabi, un rico arroz con callo de hacha y chícharo, una sopa miso y de postre un helado de camote morado con fresas y también una pasta de mochi matcha con lentejas dulces. Para maridar acompañamos la comida con dos garrafas de sakes distintos, recomendados por el mismo chef, que acompañaron la comida perfectamente. Uno más ligero para las entradas y otro más potente para el final.

Sin lugar a duda, este es un restaurante para ir con calma. Para matar la tarde viajando a través de los sabores. Envolverte en una conversación deliciosa con tu acompañante y tener una experiencia única en la ciudad. Si eres amante de la cocina japonesa y quieres explorar una nueva cocina, este es el lugar para hacerlo.

Espero que tengas un fabuloso día y recuerda, ¡hay que buscar el sabor de la vida! *** Asai Kaiseki Cuisine Calle Emilio Castelar 149 Polanco III Secc, Mexico City Tel. 55 5190 7461

Recomiendo hacer reservación.

Cuenta con valet parking.

Está un poco escondido. La entrada y valet es por la Fontaine y es el mismo acceso en donde está el restaurante Comrade.