GABRIELA RIVERA | gAbS_07
A partir de este año, la prueba PISA se aplicará por computadora y se evaluarán las habilidades sociales que tienen los alumnos para enfrentar problemas cotidianos, anunció Andreas Schleicher, director de Educación de la OCDE.
En conferencia de prensa para presentar la prueba de este año, explicó que este año el gobierno mexicano decidió evaluar a 10 mil 317 estudiantes de 15 años a partir de un equipo de cómputo. Sin embargo, no especificó el costo que representará para el sistema educativo.
Un estudio comparó los dos métodos (el papel y la computadora) y encontró que los estudiantes pueden hacer el examen en la computadora, porque tienen las capacidades necesarias. Esto es positivo y nos indica que están preparados para usar las nuevas tecnologías, dijo Schleicher.
El gobierno tomó la decisión a pesar de que y más de 42 mil aulas sin luz, incluyendo 536 telesecundarias que requieren de energía eléctrica para poder operar. Además, de que hay más 123 mil planteles sin conexión a internet, según datos del Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos de Educación Básica y Especial (Cemabe).
[su_pullquote]PISA busca entender cómo ven los valores y la educación los jóvenes mexicanos, pues hasta ahora la prueba sólo ha demostrado que los estudiantes pueden memorizar y reproducir lo que aprenden en el aula, pero no son capaces de aplicar lo aprendido a problemas cotidianos.[/su_pullquote]
Pese a ello, el directivo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) descartó que hubiera problemas para realizar las evaluaciones en 383 escuelas secundarias y bachilleratos públicos y privados, del 27 de abril al 14 de mayo.
Durante la presentación de la prueba, Andreas Schleicher informó también que a partir de este año la prueba tendrá una serie de preguntas relacionadas con competencias sociales, que medirán los aspectos sociales y emocionales de los estudiantes.
Con estos indicadores, PISA busca entender cómo ven los valores y la educación los jóvenes mexicanos, pues hasta ahora la prueba sólo ha demostrado que los estudiantes pueden memorizar y reproducir lo que aprenden en el aula, pero no son capaces de aplicar lo aprendido a problemas cotidianos.
[su_pullquote]“Los resultados reflejan la situación que hay en las aulas"[/su_pullquote]
De igual manera, el directivo señaló que los alumnos de tercero de secundaria y primero de bachillerato que presentan el examen tienen todas las capacidades para alcanzar un nivel más alto que el que generalmente logran -420 puntos en promedio alcanzaron hace dos años, en la última prueba-.
Y advirtió que cuando los estudiantes tienen un promedio menor a esa cifra ya hay una desconexión entre lo que aprenden en clase y el exterior, lo que se traducirá en la dificultad para encontrar un empleo.
“Los resultados reflejan la situación que hay en las aulas”, aseguró Schleicher, por lo que es necesario colocar a la escuela como el centro de la educación y tomar el liderazgo de la educación de los alumnos.