¿Cuáles acuerdos nacionales?

24 de Abril de 2024

Juan Antonio Le Clercq
Juan Antonio Le Clercq

¿Cuáles acuerdos nacionales?

Juan Antonio Le Clercq

El Presidente intenta desesperadamente salir del pasmo y superar la irrelevancia política en los que ha caído luego de la victoria de Trump y como resultado de una tasa de aprobación que con dificultad alcanza el doce por ciento. En el camino repite la visión y prácticas políticas que contribuyeron a hundir su proyecto de gobierno.

Como ocurrió en agosto, el equipo de Trump ganó la agenda y colocó contra las cuerdas al gobierno mexicano. Hicieron pública la fecha de encuentro entre ambos presidentes y la agenda de trabajo, centrada en la renegociación del TLC, como si fuera un asunto unilateral, de competencia exclusiva de los estadunidenses. Como cereza en el pastel, avanza la decisión de construir el muro fronterizo.

Lo primero que habría que señalar es que no se entiende la necesidad de sentar con tal urgencia a Peña Nieto con Trump. En todo caso son ellos los de las prisas, los que quieren implementar su agenda política. ¿Por qué concederles todo tan pronto, por qué regalar los tiempos y las formas, por qué ceder a la imposición de su agenda?

Menos se entiende que se arriesgue al titular del Ejecutivo en un primer encuentro impulsivo. El más mínimo error, cualquier cosa que salga mal, juega en contra del gobierno y golpea lo poco que queda de credibilidad. Difícil pensar que una foto de Peña Nieto con Trump tranquilice a los mercados o mejore la precepción que los mexicanos tienen de su Presidente. A la luz de las recientes decisiones de Trump, mantener el encuentro entre presidentes sólo agudiza el sentido de humillación nacional.

Lo segundo es el autoengaño, pensar que es real la acartonada simulación de unidad nacional. En menos de un mes se ha convocado dos veces a los representantes institucionales y a las fuerzas productivas, con formas y escenarios muertos hace treinta años, para acuerpar al gobierno ante la emergencia nacional. ¿Realmente alguien cree que los discursos del gabinete, Pablo Escudero o Carlos Aceves reflejan la cohesión nacional? Escudero, además de afirmar que podemos prescindir del TLCAN, llegó a comprometer la unidad del Senado con una política de Estado. Fácil prometer discursivamente la unidad de grupos parlamentarios en torno a la agenda presidencial, más difícil hacerlo realidad cuando los partidos calculan estrategias y esperan que los costos políticos se materialicen como derrotas electorales para el PRI.

Lo tercero es la presentación de una agenda más propia de una plataforma electoral, que los criterios para negociar con un individuo voluntarioso y caprichoso que asume como principio la imposición de su visión del mundo. El posicionamiento presidencial, de una administración moribunda, propone reorientar la política exterior, diversificar intereses comerciales, así como guiar las negociaciones a través de cinco principios tan generales que no se puede estar en desacuerdo en su obviedad y diez objetivos donde se mezclan metas relevantes, lugares comunes y buenos deseos.

Tres cosas quedan en claro esta semana: primero, nuestras autoridades han caído en la trampa y los tiempos de Trump; segundo, su “carta fuerte”, el acercamiento “personalísimo” a través de Jared Kushner, se ha desvanecido ante la velocidad con que Trump implementa su agenda; tercero, reconociendo su propia debilidad en la mesa de negociaciones, nuestro gobierno se cura en salud y comienza a advertir sobre la probabilidad de salir del TLCAN y la necesidad de diversificar nuestras relaciones e intereses con todas las regiones del mundo.

Lo que este gobierno sigue sin entender, es que requiere consolidar alianzas con actores políticos, económicos y sociales, en México y Estados Unidos, más allá del decorado jurásico. La clase aplaudidora no representa un apoyo firme para que el Presidente y su equipo tengan un margen más sólido en una negociación extremadamente compleja donde llevamos todas las de perder. Necesitan escuchar a las voces críticas que tanto les incomodan y están obligados a tejer acuerdos con actores opositores y líderes sociales reales, para entonces poder hablar de agendas nacionales y prepararnos con mayor efectividad ante el torbellino que se avecina.

@ja_leclercq

Profesor de Relaciones Internacionales y Ciencia Política de la UDLAP. Director del Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia (CESIJ).