Jorge Humberto López Portillo Basave, exdirector de Exportadora de Sal, S.A. de C.V (ESSA), fue inhabilitado cinco años por la Secretaría de la Función Pública (SFP) para desempeñar cualquier cargo o comisión en el gobierno, por haber tomado decisiones sin el aval, consentimiento y aprobación del Consejo de Administración. En un breve comunicado, la dependencia informó que “el trabajador”, a quien no identificó por nombre, suscribió un contrato de compraventa y suministro de salmuera residual, sin tener la aprobación del máximo órgano de la empresa de participación estatal mayoritaria en copropiedad con Mitsubishi Corporation. Sin embargo, poco después fuentes de la dirección de Comunicación Social de la dependencia confirmaron al diario La Jornada la identidad del sancionado. El servidor público ya había sido inhabilitado por 10 años, en 2015. En aquella ocasión, fue por haber entregado 92 millones de pesos como anticipo para la compra de una barcaza, sin contar con la autorización del Consejo de la firma. Ahora, López Portillo, exdirector general de ESSA entre 2013 y 2014, cuenta con la posibilidad de impugnar dicha resolución. En una investigación realizada por ejecentral, y publicada en marzo pasado bajo el título de Guerrero Negro en riesgo de crisis ambiental, se documentó que en 2013, ESSA había suscrito un contrato con la empresa Pacsys S.A de C.V. para venta de salmuera residual, aunque sin explicación aparente lo incumplió y decidió continuar con su plan de “almacenaje y disposición en mar (tirar al mar)”. Cabe destacar, que López Portillo Basave fue detenido el 14 de septiembre de 2016 en la Zona Rosa de la Ciudad de México, cuando PGR ejecutó una orden de captura en su contra, acusado que haber puesto precio a la salmuera residual almacenada por dos décadas en Guerrero Negro. Fue ingresado al Reclusorio Sur en cumplimiento a la orden del Juzgado de Distrito de Procesos Penales Federales, en la causa 40/2016.
Mi delito es haberle dicho al Consejo de Administración que ese producto lo podíamos vender en lugar de pagar 600 millones de pesos por tirarlo y venderlo para el gobierno de México en mil 800 millones de dólares aproximadamente”, señaló días después en entrevista tras haber pagado una fianza de 56 mil pesos, que le fijó el juez para salir de prisión.
El exdirector de ESSA denunció que se le usó como “chivo expiatorio” para distraer el desfalco patrimonial que han permitido algunos integrantes del Consejo contra la empresa.
Ellos dicen es que el Consejo me autorizó la venta de esa basura porque yo lo solicito, pero que nunca fijó exactamente el precio, pero las irregularidades de las que hablan son la cortina de humo que hemos venido padeciendo y tratando de disipar, a raíz de que denunciamos que había irregularidades en la administración de la empresa cuando menos del 2008 al 2014. Irregularidades que contablemente podemos probarlo y que muestran que el gobierno mexicano vende un producto y al año siguiente, ya cerrado el ejercicio fiscal, ha regresado alrededor de dos mil millones de pesos a la empresa a la que le vendió la sal de manera inicial y la empresa se llama Mitsubishi Corporation”, agregó en aquel momento.
De acuerdo con documentos a los que tuvo acceso ejecentral, Exportadora de Sal acumula cuatro mil 500 hectáreas de salmuera desde hace 20 años, que pudo vender en 40 mil millones de pesos, al valor del mercado de químicos, y por las hay un riesgo de crisis ambiental en el desierto del Vizcaíno y la Laguna Ojo de Liebre, santuario de la ballena gris, en Guerrero Negro, Baja California Sur. Este residuo es susceptible de reaprovecharse ya que se convierte en un derivado del proceso de producción de sal, como lo precisa el acuerdo 51ESSA 10/2013 emitido por ESSA. La salmuera ha sido almacenada desde 1996, por la firma copropiedad del Estado mexicano y Mitsubishi Corporation, lo que a un cálculo realizado de acuerdo a la cantidad de sal que produce sumaría entre 340 y 380 millones de toneladas, ubicadas en la zona 2b Sur del Desierto del Vizcaíno. Este producto no se evapora por su alta concentración de magnesio y cloro, por lo que los niveles de almacenamiento se mantienen. A lo que se suma, que la salmuera se ha ido acumulando en un área sin piso firme que impida la filtración al subsuelo y sólo tiene diques de contención que frenan su salida al mar. Este manejo inadecuado de los residuos y la presencia de lluvias atípicas en marzo pasado habrían vencido los diques y provocado contaminación por derrame en la Bahía Ojo de Liebre, lo que derivó en a muerte de tres ballenas en un lapso de 15 días, lo que ejecentral también documentó en video. La investigación publicada, puso en alerta a la Unesco quien inició una investigación, que de confirmar las violaciones a leyes ambientales nacionales e internacionales, llevaría al gobierno de México a tribunales internacionales por el daño al mar y al desierto, que podría catalogarse como un ecocidio, al no reportar el derrame. Tanto el no vender la salmuera como el mal manejo en su acumulación se suman a lo que documentó también ejecentral sobre cómo a través de un entramado de operaciones y contratos para la explotación, traslado y comercialización de la sal mexicana, Exportadora de Sal y las empresas de participación estatal Fideicomiso de Fomento Minero (FIFOM), Baja Bulk Carriers (BBC), benefician cada año, con más de mil millones de dólares, a Mitsubishi Co. (MC), el corporativo japonés que ha sido señalado en tribunales de Estados Unidos como lavador de dinero a favor de Estados terroristas. Las distintas irregularidades en ESSA han sido documentadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), en la revisión de las cuentas públicas de 2013, 2014 y 2015. (Con información de Luis León) EC
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