En calidad de testigo, Miguel Ángel Martínez Martínez “"El Toloche”, quien fungió como piloto de Joaquín Guzmán Loera, declaró este lunes que también él fue el encargado de contactar a organizaciones de tráfico de sustancias ilegales provenientes de Colombia para el Cártel de Sinaloa. Durante el sexto día de juicio contra El Chapo en la Corte Federal de Brooklyn, Estados Unidos, Martínez Martínez ocupó el banquillo de los testigos y frente al juez Brian respondió las preguntas de la Fiscalía de Nueva York.
¿Para quién trabajó?”, le preguntó el fiscal, a lo que el testigo señaló sin titubear a Joaquín Guzmán Loera, tras lo cual le preguntó: "¿Con quién se reportaba usted?”. “Exclusivamente con Joaquín Guzmán Loera”, respondió. "¿Con qué otro nombre se le conocía”?, “El Chapo, El rápido, el ingeniero, el doctor, el arquitecto”, se escuchó de Martínez en la sala del tribunal.
Luego, el fiscal le preguntó si veía a Guzmán Loera en la sala y tras responder de forma afirmativa le identificó como el hombre que llevaba la chaqueta negra y camisa crema, la indumentaria de hoy de “El Chapo”. Martínez Martínez además era el encargado de recibir los cargamentos que llegaban desde Colombia y enviarla a Estados Unidos. Martínez Martínez testificó que trabajó para el Cártel de Sinaloa entre 1986 y 1998, y laboró como piloto, así como para hablar con cárteles de Colombia, recibir aviones con cocaína, almacenar y enviar drogas y pagar. Narró que en el primer viaje que realizó desde Colombia transportó mil 470 kilos de cocaína, luego de lo cual realizó numerosos viajes de negocios a ese país y solicitaba a cárteles de esa región enviar “tantas toneladas como pudieran” de cocaína hacia México. Durante su testimonio afirmó que abrió lo que definió como la “oficina del Cártel de Sinaloa en la Ciudad de México”, donde laboró con un abogado a quien identificó como Humberto Loya Castro, quien presuntamente “hacía todos los arreglos de Guzmán con la policía, para que lo dejaran trabajar”. El piloto, que dijo obtuvo su licencia en Texas. Sobre el porqué terminó su relación laboral con Loera Martínez explicó como anécdota que en un viaje a Durango rompió la hélice de un avión y El Chapo le dijo que era un “mal piloto”, tras lo cual no volvió a trabajar para él. Como parte de las medidas, el testigo no podrá ser dibujado por las artistas de la Corte, por petición del gobierno de EU.