El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confesó a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, que hubo quienes querían echarlos a pelear, pero ambos declinaron entablar un pleito.
Al encabezar un acto público en Teapa, Tabasco, López Obrador reveló una llamada con el mandatario estadounidense previo al anuncio de la firma del T-MEC: “Todos apostaban a que, como soy de esta tierra, soy del trópico que iba yo a pelearme con Donald Trump; hasta él mismo me lo dijo: ‘estaban apostando a que nos íbamos a pelear pero yo no me quiero pelear con usted’, me dijo, ‘pues yo tampoco’ y para que haya pleito se necesitan dos”, agregó.
Mencionó, “nos hemos entendido y esto ha sido bueno, conveniente para Estados Unidos y para nuestro gran país, nuestra gran nación, México, nos hemos entendido porque ha habido respeto mutuo y esto va a ayudar mucho”.
El mandatario remarcó los beneficios de la renegociación del que era conocido como Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN): “Esto va a significar la llegada de inversión extranjera y la creación de muchos empleos y bien pagados en beneficio del pueblo de México”.
En este Municipio, López Obrador recordó que ahí era originaria su primera esposa, Rocío Beltrán, quien, sostuvo, educó muy bien a sus hijos.
“Mi finada esposa, Rocío, que me ayudó mucho de distintas maneras, en los momentos más difíciles, estuvo conmigo, pero sólo quiero destacar ahora que me ayudó en la formación de nuestros hijos porque yo andaba en la lucha y quien se hizo cargo de formarlos fue ella y me los dejó bien formados”, dijo.