Zoé Robledo, nuevo director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), reconoció la labor de Germán Martínez, quien renunció al encargo, aunque omitió hablar del estado en el que se encuentra la institución.
En la carta que presentó, Germán Martínez señaló que el control del gasto tiene dos consecuencias fatales en el Instituto: pasillos de espera llenos de personas adoloridas y mal trato o retraso en la atención a pacientes; y un segundo efecto indirecto todavía peor: el fortalecimiento de los servicios de salud privados, que ocasionará mayor “gasto de bolsillo” de las familias cuando sus seres queridos tengan un padecimiento.
De esto, Zoé Robledo no hizo ningún pronunciamiento y únicamente señaló que el mayor desastre del periodo de los últimos 36 años fue, sin duda, la destrucción del contrato social.
Al senador Germán Martínez mi reconocimiento al esfuerzo que realizó en estos meses. Como se lo expresé, se puede cambiar de asta pero uno nunca se cambia de bandera”, expresó.
Robledo se reunió con integrantes del sector Salud y con el presidente, también se prevé que hoy revise con Carlos Urzúa, titular de Hacienda, la situación del IMSS.
El chiapaneco expresó que el Plan Nacional de Desarrollo busca que hacia 2024 todos los mexicanos puedan recibir atención médica y hospitalaria gratuita, con el suministro de medicamentos y material de curación.
“A los derechohabientes les digo, esta es la más alta responsabilidad de mi vida pública, no podemos fallarles”, afirmó.
El morenista agregó que la desigualdad social que vive el país, el desmantelamiento no es un problema financiero nada más, “ese problema lo ocasionó la política y la política lo puede resolver”.EM