Gracias a la cirugía estética, tener senos firmes y de buen tamaño es posible desde hace ya varias décadas. La transformación de ellos ha sido evidente, pues pasaron de las bolsas rellenas con agua salina, hasta los implantes de gel que se asemejan cada vez más a un seno natural. Sin embargo, la FDA emitió una alerta hace unos días ante el retiro de los implantes con textura elaborados por Allergan.
Esto ocurrió ante el riesgo de un cáncer poco común reportado a la FDA, cuyo nombre es linfoma anaplástico de grandes células asociado a los implantes mamarios (BIA-ALCL).
Para atender el tema se sugirió a las firmas que elaboran implantes crear en ellos una capa de protección que los debe cubrir así como debe existir una advertencia en los empaques tanto de solución salina y de gel de silicón que explique los riesgos asociados con las leyendas: “la posibilidad de desarrollar complicaciones se incrementa con el paso del tiempo” así como también “algunas complicaciones requerirán de otras cirugías”.
Esto será obligatorio para la revisión de los doctores junto con sus pacientes, así como deberán entregar formularios que establezcan que las personas que se sometan a estas cirugías conocerán perfectamente de los posibles riesgos.
Desafortunadamente al día de hoy, esta práctica sólo se realiza en Estados Unidos, en México aún no se implementa a pesar de ser el tercer país en el mundo que realiza la mayoría de estos implantes después de Estados Unidos y Brasil.
Sin embargo, si te pusiste recientemente implantes de senos, te sugerimos llamar a tu médico para averiguar si son los que se han retirado de la marca Allergan, así como también realiza por lo menos una vez al año, una cita para mamografía y ultrasonido para que detectes, en su caso, cualquier anomalía y pueda ser tratado con oportunidad.