La mayoría de los sistemas penitenciarios de todo el mundo sufren de sobrepoblación y esto tiene consecuencias que incluso podrían afectar la salud mental y física de los internos, que pone en riesgo la seguridad y reduce las probabilidades de reinserción.
Pero lo más importante, en lugar de que el mundo mejore y disminuya el delito, gracias a la imposición de sanciones, y la prisión sirva realmente para la reincorporación social de los sentenciados, es todo lo contrario. Prácticamente podría decirse que el mundo ha fracasado, pues en las últimas décadas se ha observado un aumento acelerado y constante de la población carcelaria.
En que se traduce: en más 11 millones de personas privadas de libertad en el mundo, de las cuales más de tres millones, cerca del 30%, se encuentran en prisión preventiva; es decir, en proceso judicial y sin sentencia.
Si bien las causas de este incremento son complejas, de acuerdo con un informe de World Prision Break, lo que es real, es que la sobrepoblación carcelaria provoca condiciones de vida inhumanas y degradantes.
A esto se suman también los altos costos al erario y afecta de manera desproporcionada a grupos marginalizados de todas las sociedades, y por si fuera poco, los sistemas penitenciarios no pueden, con tantos internos, ocuparse de manera eficaz de la minoría de los reclusos que suponen un verdadero problema para la seguridad pública.
Los países que incluye en su reporte World Prision Break guardan diferencias respecto a cifras e índices de población carcelaria. Un ejemplo es Estados Unidos, país que cuenta con más de dos millones de personas privadas de libertad. Aquí habita la población carcelaria más alta del mundo, lo que equivale a una tasa de encarcelamiento de 639% (que es una proporción de reclusos por cada 100 mil habitantes).
A este número le sigue China, Brasil, India, Rusia y Turquía, con un millón 690 mil reclusos, 811 mil 707, 488 mil 511, 468 mil 237 y 314 mil 502, respectivamente.
Incluso México no se queda atrás y aparece en el top 10 de países con más población carcelaria. Se ubica en un noveno sitio, al albergar hasta 226 mil 111 personas, según el estudio.
Los países con mayores índices de sobrepoblación son Filipinas (con una tasa de ocupación del 460 %), Haití (450 %) y Guatemala (370 %).
Nivel de ocupación. Este es el nivel de ocupación carcelaria en los países de América, de mayor a menor, según la capacidad oficial.