El Papa Francisco puso otra vez el foco en el flagelo del narcotráfico en su natal Argentina y provocó la reacción del gobierno de Cristina Fernández, luego que en una entrevista a un diario editado por los habitantes de villa La Cárcova, uno de los barrios marginales más populosos de la provincia de Buenos Aires, el Pontífice expresó que en su país “hace 25 años era un lugar de paso de la droga, hoy en día se consume. Y, no tengo la certeza, pero creo que también se fabrica”.
El jefe del gabinete de ministros Aníbal Fernández le respondió el marte al Pontífice en rueda de prensa que “Naciones Unidas nunca le ha dado esa valoración y mucho menos ha considerado que la Argentina es un país de consumo.
Semanas atrás un allegado al Papa difundió un correo electrónico en el que Francisco alertó sobre el riesgo de una “mexicanización” de Argentina ante el incremento del narcotráfico en la nación sudamericana, lo cual le valió al Vaticano un incidente diplomático con México.