La tragedia de la Línea 3 del Metro, que dejó como saldo la muerte de la joven estudiante Yaretzi Adriana y 106 lesionado, reveló otro tipo de situaciones que a las que se enfrenta el Sistema de Transporte Colectivo.
En los peritajes y las labores de rehabilitación, las autoridades del Metro descubrieron que en la zona donde ocurrió el accidente, entre las estaciones La Raza y Potrero, había señales de robo de cable.
De acuerdo con autoridades, son casi 50 metros de cable de cobre, los cuales pertenecen a las instalaciones eléctricas de las vías.
La información refiere que fueron seis tramos de ocho metros cada uno que fueron sustraídos de las vías 1 y 2, en la interestación de las estaciones referidas.
El caso se encuentra actualmente bajo investigación de la Fiscalía General de Justicia (FGJ), entidad que ha recibido una denuncia por parte de una víctima.
El quejoso trata de imputar responsabilidad al director general del organismo, Guillermo Calderón; el subdirector general de Mantenimiento, Nahum Leal Barroso y Alberto García Lucio, cesado como subdirector de Operación, y cuatro funcionarios más.
El documento de 18 fojas obtenido por El Universal señala que la denuncia fue interpuesta el marte 10 de enero por el abogado Christopher Estupiñan; este último es el mismo litigante que representa a las víctimas del colapso de Línea 12- producto de ese incidente ocurrido el 3 de mayo de 2021, hubo 26 fallecidos y 80 heridos-. DJ
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