La Ley de Seguridad Nacional promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador para regular las labores de agentes extranjeros en México fue aprobada por la Cámara de Diputados, con lo que se remitió al Ejecutivo federal para sus efectos constitucionales.
Tal y como se tenía previsto en la agenda de San Lázaro para este, su último día de sesiones del periodo ordinario, la reforma avanzó con 329 votos a favor, 98 en contra y 40 abstenciones.
De acuerdo con la Ley, se considera a un agente extranjero como un funcionario extranjero que en sus países de origen ejerce funciones policiales, de inspección o de supervisión de las leyes y otras disposiciones de carácter reglamentario o técnico especializado.
Así, se regulan las actividades de estos agentes en cuanto al intercambio de información con autoridades mexicanas. Con ello se ordena a Relaciones Exteriores y a otras dependencias como la Marina, Defensa Nacional y Protección Ciudadana para resolver la acreditación y circunscripción en la que dichos agentes laborarán.
La Ley establece que estos agentes no podrán desarrollar conductas reservadas para agentes mexicanos, y tendrán prohibido realizar o inducir detenciones a través de terceras personas.
Al respecto la diputada Rocío Barrera Badillo, presidenta de la Comisión de Gobernación y Población, señaló que esta reforma no concede ningún tipo de inmunidad pese a contar con inmunidad funcional, pues si los agentes cometen delitos serán sometidos a la justicia mexicana
Abundó que se establece la integración de dos órganos auxiliares del Consejo de Seguridad Nacional: el Grupo de Alto Nivel de Seguridad y el Grupo de Coordinación Operativa.
Mientras el primero estará destinado a la atención y gestión de convenidos, programas y temas estratégicos de cooperación, el segundo coordinará y supervisará la ejecución de estos convenios y programas. CJG
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