jcrodriguez@ejecentral.com.mx Aritmética mexiquense: Un partido nuevo irrumpe y casi gana; la fuerza hegemónica sufre para sacar 2 puntos de ventaja, y al que todos daban por muerto se convierte en la revelación. El estado de México ya no es el mismo Esta semana murió el mito de que aquel candidato que gana en las zonas densamente pobladas se lleva la gubernatura del estado de México. La aspirante de Morena, Delfina Gómez Álvarez, triunfó en los distritos más urbanizados, donde habita el 43% de los electores, tales como Ecatepec, Tlalnepantla, Naucalpan, Texcoco, Cuautitlán Izcalli, Atizapán de Zaragoza, Coacalco, Tultitlán, Tuxtepec, Ixtapaluca y Tecámac. Pero estos triunfos en el cinturón urbano que rodea a la Ciudad de México —donde habitan 4.9 millones de votantes— no le alcanzaron para superar a Alfredo del Mazo, cuya coalición (PRI-Verde-Nueva Alianza-Encuentro Social) se apoderó de las zonas rurales de la entidad y de algunos distritos urbanos como Toluca, Chimalhuacán, Los Reyes, Metepec y Nicolás Romero. De acuerdo con los resultados del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), el aspirante priista llevaba la delantera con 33.7% de los votos (un millón 955 mil 347 sufragios) y había obtenido la victoria en 21 de los 45 distritos mexiquenses. Por su parte, Delfina Gómez iba en segundo lugar con 30.8% de la votación (un millón 786 mil 962 votos) y se llevó la victoria en 20 distritos. [gallery size="medium” ids="760748,760749,760750,760751"] Juan Zepeda, del PRD, obtuvo 17.7% de la votación (un millón 31 mil 791 votos) y se alzó con la victoria en los tres distritos en que se divide el municipio de Nezahualcóyotl, su terruño. Por su parte, la panista Josefina Vázquez Mota consiguió 11.2% de los votos (654 mi 681 sufragios) y sólo logró imponerse en uno de los tres distritos en que se divide el municipio de Naucalpan. El actual mapa político del Estado de México es muy distinto al de hace seis años, cuando Eruviel Ávila ganó la elección. Ese año, el PRI barrió en todos los distritos y alcanzó una votación récord de tres millones 18 mil 588 sufragios. Lo obtenido este año por Del Mazo equivale al 64% de los que cosechó Ávila. De confirmarse las tendencias del PREP, Del Mazo habrá superado los 1.8 millones de votos que obtuvo Enrique Peña Nieto en las elecciones de 2005 y los 1.3 millones conseguidos por Arturo Montiel en 1999. Ese año, si bien ha sido la peor votación obtenida por el PRI, en términos porcentuales le fue mejor a Montiel, quien se coronó con el 41% de los sufragios, muy lejos del 33% de Del Mazo. Uno de los casos que llama la atención es el municipio de Ecatepec, que 
está dividido en cinco distritos por su elevada densidad poblacional (tiene 1.6 millones de habitantes y 1.1 millones de electores). El lugar de origen del actual mandatario Eruviel Ávila siempre le había dado la victoria al PRI; sin embargo, en la elección del 4 de junio cambió de bandera y dio una sorpresiva victoria a Delfina Gómez.
La candidata morenista obtuvo 196 mil 368 votos, mientras que Del Mazo alcanzó 159 mil 69. Una de las razones por las cuales el triunfo en Ecatepec no se reflejó en los resultados finales es la baja participación en el municipio (sólo 47% de los ecatepequenses fueron a las urnas). Además, este año hubo menos personas inscritas en la lista nominal; mientras que en 2011 se empadronaron un millón 444 mil 250 personas, para estos comicios sólo aparecieron en la lista nominal un millón 103 mil 956 electores.
Hace seis años, Ecatepec le dio 372 mil 635 votos a Eruviel Ávila, la mitad de los que el domingo le dio a Del Mazo. De igual manera, el PRD obtuvo en 2011 148 mil 623 sufragios, muy por arriba de los 89 mil 892 que conquistó este año. Un fenómeno similar —atribuido a la migración, a la elevada población flotante y a la inseguridad— ocurrió en Tlalnepantla, otro de los municipios más poblados del estado de México (tiene 683 mil 808 habitantes) y cuyo territorio se divide en dos distritos. Mientras que en 2011 la lista nominal era de 564 mil 64 electores, para los comicios del domingo había 530 mil 39 personas habilitadas para votar, 34 mil menos. Hace seis años, el PRI obtuvo 126 mil 357 votos, mientras que el PRD logró 48 mil 847. Para 2017, Morena consiguió 90 mil 750 votos, el PRI 71 mil 788 y el PRD 26 mil 749. Es decir, el voto se atomizó y aunque Morena se llevó el triunfo en Tlalnepantla, no fue suficiente para hacer la diferencia en el conteo global. 
Después de la jornada del pasado 4 de junio, los distritos que se confirman como priistas de “hueso colorado” son Toluca, Lerma, Tejupilco, Valle de Bravo, Atlacomulco —lugar de nacimiento del presidente Enrique Peña Nieto—, Jilotepec, Ixtlahuaca, Amecameca y Nicolás Romero. Desde 1999, en esas demarcaciones siempre ha ganado el tricolor. En tanto, los distritos que históricamente habían sido priistas, pero que este año le dieron su afecto a Morena fueron Zumpango, las cinco zonas de Ecatepec, Chalco e Ixtapaluca. Y los distritos que se consolidan como los que han tenido mayor alternancia son Tlalnepantla, Naucalpan, Texcoco, Metepec y Cuautitlán Izcalli. Respecto al PRD, Juan Zepeda se podría convertir en el candidato perredista con mayor caudal de votos, pues con un millón 31 mil 791 sufragios supera por poco a Alejandro Encinas, que en 2011 alcanzó un millón 20 mil 857; a Yeidckol Polevnsky Gurwitz, que en 2005 logró 918 mil 635, y a Higinio Martínez, que en 1999 ganó 710 mil 500 sufragios. Del lado panista, Josefina Vázquez Mota y sus 654 mil 681 votos superan a Luis Felipe Bravo Mena, que en 2011 apenas cosechó 598 mil 45 votos, pero están muy lejos del millón 146 mil que obtuvo José Luis Durán Reveles en 1999 y los 936 mil 860 que se adjudicó Rubén Mendoza Ayala en 2005.
<<El dato
El Instituto Electora del Estado de México tiene entre el miércoles 7 de junio y hasta el lunes 12 para realizar el cómputo distrital.