EU y talibanes logran principio de acuerdo de paz

20 de Abril de 2024

EU y talibanes logran principio de acuerdo de paz

Estados Unidos mantiene en Afganistán la guerra más larga de su historia, desde su intervención en 2001 para derrocar al régimen de los talibanes

Tras seis días de conversaciones, Estados Unidos y los talibanes alcanzaron un principio de acuerdo de paz que incluiría la retirada de tropas estadunidenses, el compromiso de evitar el uso de Afganistán por grupos terroristas y un alto al fuego previo a nuevas conversaciones con el Gobierno de Kabul. De acuerdo con una entrevista para el diario The New York Times el enviado especial de Estados Unidos para Afganistán, Zalmai Khalilzad, dijo que cuentan con el borrador de un acuerdo de principio que tiene que ser trabajado antes de que se convierta en un pacto. Subrayó que “los talibanes se han comprometido a hacer lo que sea necesario para prevenir que Afganistán no se vuelva a convertir en una plataforma interna para grupos terroristas”. No obstante, agregó que pese a tener “confianza” en lo acordado “aún deben concretarse los detalles”, agregó Khalilzad quien viajó a Kabul, para informar al presidente afgano, Ashraf Ghani, de los avances del encuentro. Por su parte, la delegación estadounidense, dijo, volverá a reunirse con los talibanes para discutir la participación de las autoridades afganas en los diálogos, un objetivo que siempre se ha topado con la negativa de los insurgentes, al considerar al Gobierno afgano como una mera “marioneta” de Washington.

Presidente afgano exhorta a los talibanes a “negociaciones serias”

Tras el resultado de las conversaciones, Ashraf Ghani, presidente de Afganistán, exhortó a los talibanes a “iniciar negociaciones serias” con el gobierno afgano, para aprovechar los “avances” anunciados por Estados Unidos y los insurgentes después de una semana de negociaciones en Catar. “Exhorto a los talibanes (...) a demostrar su voluntad afgana, que acepten la exigencia de paz de los afganos y comenzar conversaciones serias con el gobierno afgano”, declaró con tono solemne en un discurso televisado desde el palacio presidencial en Kabul. “Queremos la paz, la queremos de manera rápida, pero la queremos con un plan”, aseveró Ghani. “No olvidemos que las víctimas de esta guerra son afganos y que el proceso de paz debe ser dirigido por los afganos. ¡No queremos repetir los errores del pasado!”, añadió, haciendo referencia a episodios de la turbulenta historia del país. Las autoridades afganas se quejan de haber sido excluidas de las conversaciones en Doha, y advirtieron que un acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes necesita la aprobación de Kabul. Los talibanes han rechazado siempre de manera categórica hablar directamente con el gobierno afgano, al que describen como una “marioneta” de Washington. Sin embargo, ambas partes informaron el sábado sobre “progresos” en las negociaciones y convinieron continuarlas, aunque todavía no se ha anunciado ninguna fecha concreta para una próxima ronda. Su duración, sin precedentes, ha alentado la esperanza de que un acuerdo entre los talibanes y Estados Unidos pueda constituirse en la base para conversaciones formales de paz con el gobierno de Kabul, aunque aún quedan muchos puntos sensibles que lo bloquean. “Anoche comuniqué al presidente Ghani sobre los progresos logrados. La paz es la gran prioridad de Estados Unidos en Afganistán, un objetivo que todos los afganos comparten”, confirmó poco después Khalilzad en la red Twitter. “Contamos con el proyecto de un marco que aún debe ser completado para convertirse en acuerdo”, declaró este lunes al New York Times.

Diálogo entre afganos, única solución

“Los talibanes se comprometieron, para nuestra satisfacción, a hacer todo lo necesario para evitar que Afganistán se convierta en una plataforma para grupos o individuos terroristas”, añadió. Khalilzad aseguró al jefe de Estado afgano que un “diálogo entre afganos” es para Estados Unidos la "única solución para una paz duradera en Afganistán”. “Mi papel consiste en facilitar las conversaciones entre afganos”, agregó. Entre los puntos de fricción figuran la cuestión de un alto el fuego y un calendario para la retirada de las tropas estadounidenses del país. El presidente estadounidesnse, Donald Trump, parece tener prisa para retirarlas: a fines del año pasado manifestó su intención de retirar a la mitad de los 14 mil soldados desplegados en Afganistán en el marco de una coalición de la OTAN, liderada por Washington. Estados Unidos mantiene en Afganistán la guerra más larga de su historia, desde su intervención en 2001 para derrocar al régimen de los talibanes. Pero, son los afganos, civiles y militares, quienes pagan el precio más alto en este conflicto. El jueves, en el Foro Económico de Davos, Ghani destacó que 45 mil efectivos de las fuerzas de seguridad afganas perecieron desde su elección en septiembre de 2014, lo que representa una media de más de 28 muertos diarios. Estas bajas son consideradas “insostenibles” por los expertos. En cuanto a los civiles, muchos han recibido con escepticismo el anuncio del progreso de las negociaciones, advirtiendo su temor de que Afganistán se hunda aún más en el caos. (Con información de The New York Times y AFP) NM