En una situación de pandemia inédita para la gran mayoría de los pobladores del mundo, resulta una crisis en lo colectivo; pero sobre todo en lo individual, si tu actuar cotidiano no tiene cambios como los del resto.
Para la mayoría el “quédate en casa” resulta un reto de convivencia, entre familiares, lo cual puede tener más cosas en positivo, respecto de acciones, como el hacer limpieza profunda, organizar los espacios, jugar en familia, hacer una rica sobremesa, leer aquellos libros pendientes, ver películas o maratones de series, etc.
Para una minoría, les ha agarrado sin protocolos, sin adiestramiento previo especializado en el tema de manejo de pandemias, estrés, malas noticias, atender familiares de enfermos y un sinfín de tareas derivadas de una crisis de salud como esta del Covid-19, en estos rubros están los policías, peritos, ministerios públicos, guardias nacionales, personal de las fuerzas armadas, personal del servicio de limpia, telefonía, electricidad, protección civil, choferes de transporte público, entre algunos otros.
Los otros son médicos, enfermeras, personal administrativo de clínicas y hospitales, a todos sin duda se les debe de agradecer, el no renunciar a su cotidianidad, y ser los héroes del Covid19, con ello salvan vidas y mantienen la paz y el orden.
Sin embargo, resulta lamentable tener noticias de acciones que lejos de reconocerles como a ocurrido en otras latitudes del planeta, se generen linchamientos y discriminación en el transporte o se les baña en cloro por el portar los uniformes. A estos, los héroes del Covid-19, se les ha dejado sin los materiales básicos para realizar su trabajo (guantes, cubre bocas N95, trajes de protección, material de sanitización), está documentado, un ejemplo a vuelo de pájaro es en un hospital del IMSS en Coahuila, que ha tenido médicos y enfermeros infectados y decesos.
Los héroes del Covid-19, no son de los que usan capas y antifaz, son de carne y hueso, a ellos mi reconocimiento y como sociedad, debemos de ser la mejor versión de nosotros mismos y debemos tener la claridad quien es quien. De forma y fondo, la decisión para salvaguardar las vidas de todos es de todos y hacer lo correcto con nuestros impuestos es tema del ejecutivo, de momento debemos estar unidos, pero no ciegos, sordos y mudos dice la canción, eso se decidirá en el 2021 y 2024.