El gobierno federal necesitará contratar poco más de 33 mil profesionales de la salud para lograr que el programa IMSS-Bienestar, una de las principales promesas del presidente Andrés Manuel López Obrador, opere de manera óptima para el primer trimestre del próximo año en los primeros 15 estados del país que se incorporaron a este modelo.
La falta de personal de salud en algunos de los estados más vulnerables del país representa una disparidad de atención que podría impactar en los indicadores de bienestar de estas entidades, así como en la calidad de vida de sus habitantes.
Datos del gobierno federal revelan que tres de cada 10 profesionales de la salud que hacen falta en el programa IMSS-Bienestar pertenecen a centros médicos localizados en Oaxaca y Veracruz, pero esta cifra se dispara hasta cinco si se agrega a Michoacán a estos cálculos, lo que demuestra la vulnerabilidad de estas entidades.
33 mil médicos debe contratar el gobierno federal si pretende garantizar buena atención en el país.
Estas cifras contrastan con las de algunos estados como Ciudad de México, Colima, Tlaxcala o Baja California Sur, en donde el número de profesionales de la salud necesarios no supera los mil elementos por cada uno.
Aunque esta cifra es mucho menor a la que se requirió para hacer frente a la pandemia de Covid-19 hace dos años, expertos en salud pública señalaron que no existen condiciones para cumplir esta demanda de personal, especialmente por la falta de espacios y oportunidades para los estudiantes de estas carreras.
Gerardo López, profesor de medicina en la Ciudad de México, explicó a
ejecentral que el número de plazas para capacitar especialistas es cada vez más reducido, lo que desalienta a los estudiantes más jóvenes, quienes prefieren buscar oportunidades en otros países en donde pueden recibir mejores condiciones laborales y de seguridad.
El médico también detalló que muchos profesionales de la salud fueron contratados de manera temporal durante la pandemia, pero que no se hicieron programas de seguimiento para mantener a estos elementos en el sistema de salud pública, esto a pesar del enorme déficit que enfrentaba el país incluso antes de esta crisis.
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