El organismo autónomo al que le ha puesto el dedo el presidente Andrés Manuel López Obrador, el INAI, de los ingresos excedentes que obtendrá por intereses bancarios a través de la Dirección de Recursos Financieros (DRF), así como por sanciones a proveedores y otros productos y aprovechamientos los entregará al gobierno en turno.
Aunque el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) tiene la facultad para decidir sobre el ejercicio de su presupuesto y determinar su organización interna, el organismo ha informado por medio del Diario Oficial de la Federación que los recursos que se generen durante el ejercicio 2023 serán entregados a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
A pesar de que es anticipada la medida, ya que se desconoce el monto de los ingresos extraordinarios que pudieran obtenerse, el INAI indicó que se ha instruido a la Dirección General de Administración para que lleve a cabo las acciones necesarias para el registro ante la SHCP de dichos ingresos en los conceptos correspondientes que la Ley de Ingresos contempla.
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El presidente López Obrador se ha lanzado ante el Instituto por considerarlo ineficiente, de poca utilidad, costoso y que estaba al servicio de la corrupción por lo que ha puesto el dedo sobre de él para desaparecerlo.
Los ingresos excepcionales que logre el INAI, serán destinados, según la propia Ley, al pago de intereses de la Cuenta Pública, así como a los proyectos y programas prioritarios del Gobierno Federal.
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