Redacción ejecentral
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) reiteró la obligación que tiene el Estado mexicano de adoptar marcos jurídicos e institucionales que brinden una protección efectiva de la biodiversidad, bajo una perspectiva de derechos humanos, que debe ser uno de los principales ejes rectores para el desarrollo del país y del bienestar social.
El Organismo Nacional aseveró que los cambios descontrolados en el uso de suelo y la sobreexplotación de recursos naturales han generado la pérdida sustancial de ecosistemas y su biodiversidad de manera irreversible, lo que agrava los efectos de fenómenos naturales.
En ocasión del Día Internacional de la Diversidad Biológica, que se celebra el 22 de mayo, la CNDH señaló la necesidad de de adoptar medidas de toda índole, como políticas públicas y campañas de sensibilización, encaminadas a detener y revertir la pérdida de la biodiversidad.
La CNDH también emitió la Recomendación General No. 26, en que señaló las consecuencias negativas por la carencia de programas de manejo en las Áreas Naturales Protegidas, lo cual repercute en la protección, preservación y mejoramiento del derecho humano al medio ambiente sano.
De acuerdo con la norma mexicana de especies en riesgo, existen 475 en peligro de extinción y 896 están amenazadas, tales como el jaguar, la vaquita marina, el águila real, el lobo gris mexicano, el quetzal, las tortugas laud, carey, caguama, lora, verde y golfina, por mencionar algunas.
También es importante destacar que existen muchas otras especies de hongos, plantas y organismos invertebrados igualmente en riesgo, cuya protección y preservación es imprescindible para el funcionamiento adecuado de los ecosistemas.
Ante esta situación, el Órgano Nacional hizo un llamado a las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que promuevan políticas públicas de turismo sostenible, para aprovechar el alto potencial del país en riqueza de especies y bellezas escénicas.
Lo anterior contribuirá al logro de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, en particular de los objetivos 14 y 15, que convocan a “Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible”, y a “Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad”. MR