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La leyenda de rock‘n roll, Jerry Lee Lewis, demandó a su hija, quién fuera su manager entre 2002 y 2012, argumentando que “abusó de él” durante años, dándole “cocteles de drogas” y dejándolo solo en una casa enmohecida, y usando una máscara de oxígeno.
El intérprete de “Great Balls of Fire” declaró que su hija Phoebe gastó millones de dólares de su dinero, junto a su esposo, Ezekiel Loftin, mientras lo mantenía sedado con lo que él llama un “pesado coctel de drogas psicotrópicas”, para tenerlo “bajo control”.
Lewis también acusó a Phoebe de obligarlo a irse de tour, a pesar de sus problemas de salud. Añadió que cuando no se encontraba de gira, vivía en una casa llena de moho.
El artista, su esposa Judith, y sus otros hijos, Lori y Jerry Lee III demandaron a su hija y a su esposo la semana pasado por gastar cinco millones de su propio dinero en carros de lujo, casas y cirugía plástica.
Adicionalmente les prohibieron volver a utilizar el nombre del también conocido como “The Killer” (“El Asesino”) por cualquier motivo. Con información de The Daily Mirror. AS.