Joel Merino es conocido no solo por sus murales que llenan de color edificios, calles y museos en todo México, sino también por su deseo de demostrar las tradiciones de su natal San Juan Copala, un pueblo triqui de Oaxaca, mediante el arte. Con el objetivo de exaltar el trabajo de su gente y sus ancestros, este artista triqui de 29 años recorrerá cinco países europeos. Esta no es la primera vez que Merino viaje al viejo continente con su trabajo, ya que en 2017 fue invitado por varios artistas independientes y galerías de arte, aunque ese tiempo apenas fue una probada para expresar su arte. Esta nueva oportunidad le permitirá que lo conozcan más. Puentes, edificios gubernamentales, muros por la calle y casas-habitaciones en Francia, Bélgica, Suecia, Italia y Alemania son los espacios en los que quedará plasmada la cultura triqui. En México su trabajo ya ilumina diversos inmuebles de Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, Baja California y Guanajuato. Aunque algunas organizaciones mexicanas como el colectivo Board Dripper y la Asociación de Artesanos Indígenas Triquis Tinujei A.C., lo apoyarán durante su estancia, su viaje no es tan sencillo pues debe cubrir parte de los gastos. Por ello en sus redes sociales publicó también un anuncio sobre obra, prints, grabados y artesanías en venta para subsidiar su viaje. Desde muy pequeño, su pasión por el arte era muy evidente. Sus padres dejaron San Juan Copala en busca de estabilidad económica y una mejor vida. Ellos iban de ciudad en ciudad a vender artesanías, lo que permitió que Joel conociera más sobre el arte y desarrollar su interés.
Me gusta pintar con cualquier medio. Muchas de mis pinturas están hechas en acrílico y otras con aerosol. He tenido varios proyectos donde busco que la gente pueda conocer más de la cultura triqui, a través de imágenes o gente que es real”, relató el artista oaxaqueño.
A través del arte, Merino busca que la gente conozca quiénes somos los mexicanos, qué hacemos, de dónde somos, cuál es nuestro origen, señala.
Plasmo la identidad de mi pueblo, la vida cotidiana, a través de lo que viven mis seres queridos, mis antepasados, todo lo que identifica al pueblo: los huipiles, el traje tradicional de los hombres, así como usos y costumbres”, expresó Merino López.
Sin embargo, las imágenes no son lo único que forma parte de su obra, también su lengua materna: triqui. El busca no sólo dar a conocer la cultura de su pueblo, sino rescatar la lengua originaria de su gente, la cual pierde más hablantes conforme pasa el tiempo.
Quiero fomentar la lengua y la historia de los pueblos originarios, por eso es que toda mi obra está en triqui, naturalmente pongo traducciones, pero originalmente son en triqui para provocar la curiosidad de aprender otras lenguas nativas”, agregó.
El artista oaxaqueño estará de regreso en México el 12 de octubre para participar en el Festival de la Resistencia de los Pueblos Originarios, que se realizará en Querétaro. (Con información de Notimex) CI/EC