Gira presidencial

19 de Abril de 2024

Guillermo Sesma

Gira presidencial

GUILLERMO SESMA

Del 5 al 8 de mayo el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, sostuvo una gira de trabajo por Centroamérica y Cuba. Dicha gira generó opiniones encontradas, pues para diversos expertos en materia de relaciones exteriores, la decisión y pronunciamientos del presidente no necesariamente abonan a las tensas relaciones que ha mantenido el gobierno mexicano con los Estados Unidos en los últimos meses.

Es de todos conocido que de manera reciente la cancillería mexicana y su contraparte estadounidense han tenido que recurrir a todos los trucos posibles para que la relación no se afecte de manera más profunda.

La crisis provocada por la guerra entre Ucrania y Rusia si bien provocó ciertas tensiones, también fue un suceso lo suficientemente relevante como para que el papel de México, la cancillería y el presidente, tuvieran poca relevancia en el ámbito internacional; el gobierno estadounidense contó con sus aliados históricos y la discreción, por decirlo de manera respetuosa, de la postura del gobierno mexicano, pasó a ser un tema secundario.

Con lo anterior no quiero decir que para Joe Biden no fuera importe contar con el apoyo acrítico de todo el bloque, sin embargo, la neutralidad mexicana y su nula participación bélica en los últimos 70 años lo convertían en un aliado simbólico y casi del montón.

Los dimes y diretes entre funcionarios y liderazgos estadounidenses y el gobierno mexicano tampoco ha sido un secreto, en diversos momentos el presidente ha dado repuesta a los señalamientos y en más de una ocasión ha convertido a las autoridades estadounidenses en villanos y opositores políticos a su administración.

La coyuntura electoral en los Estados Unidos también ha tenido impacto en las relaciones entre las dos naciones, el mismo Donald Trump usó los roces diplomáticos para darle color a la campaña republicana y reforzar el discurso antinmigrante que ha usado por años.

El presidente no ha hecho gala de habilidades diplomáticas, tropieza con facilidad en esta materia y en más de una ocasión hemos visto al canciller Marcelo Ebrard poner cara de sufrimiento ante los pronunciamientos del jefe del ejecutivo.

Hacer la gira por Centroamérica y Cuba, significó para algunos el fortalecimiento de una política migratoria de corresponsabilidad entre naciones para otros es simplemente la intención del presidente por protagonizar en Latinoamérica y así fortalecerse ante el gobierno estadounidense.

Como tomarán esto los vecinos del norte aún no se saben, por lo pronto el presidente cree que no hay reclamo o represalia por su actuar, que tanto él como el gobierno estadounidense son respetuosos de la soberanía y libertad de las naciones para decidir su rumbo.

Afirmar de manera tan categoría esto se acerca más a una visión cándida de la política internacional, que a un análisis profundo de los pros y contras de las decisiones del Gobierno de la República en materia diplomática.

Si esto fue un tropiezo del presiden lo sabremos pronto, no solo por el pronunciamiento que de manera pública pueda hacer el gobierno norteamericano, sino en el rostro desencajado de nuestro estoico canciller Marcelo Ebrard.