Ricardo Monreal ha señalado que el presidente Andrés Manuel López Obrador lo deja fuera de su terna para su sucesión presidencial, ha criticado que no hay piso parejo dentro de Morena y que las “corcholatas” realicen eventos de precamapaña advirtiendo posibles violaciones a las leyes electorales, pero hoy, para el senador, todo ha sido distinto.
Un fin de semana le fue suficiente al senador de Morena para hacerse de los reflectores que regularmente ostentan Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López, quienes esta vez quedaron fuera del foco mediático, aunque lideran, en ese orden, la preferencia entre simpatizantes del partido, de acuerdo con la encuesta de El Financiero.
Arropado por más de un centenar de personas, sonriente y respondiendo con un saludo a quienes le gritaban “Presidente”, Ricardo Monreal se reunió en privado con simpatizantes en la Plaza de Toros “Arroyo”, en la Ciudad de México, en lo que pareció ser el inicio formal de su precampaña rumbo a la Presidencia.
Con el lema “Reconciliación por México”, Monreal Ávila dijo a sus simpatizantes que no se confrontará nunca con el Presidente y que nunca se pelearía con la victoria, pero sentenció que defendería todo aquello “en lo que pienso y en lo que creo”.
Fue en este evento que el senador de Morena presentó un jingle en el cual deja ver su currículum político y sus aspiraciones rumbo a 2024, pasando por su fe católica, su apoyo al presidente López Obrador y reiterando sus convicciones partidistas hacia Morena.
“No me gustan las poses, me gusta ser natural”, dice el senador mientras se quita una corbata, frente a un micrófono para después soltar “un político tiene que ser auténtico”.
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“Hola, soy Ricardo, senador con doctorado, el progreso mi objetivo y yo siempre soy su aliado”, dice en el primer verso de su rap, dejando ver su trayectoria como diputado, senador, gobernador de Zacatecas y maestro de la UNAM.
Sin embargo, no pierde la ocasión – como ocurrió en el cónclave morenista en Coahuila a principios de junio – para reclamar la exclusión de la que es objeto al no ser considerado una “corcholata” del presidente López Obrador, pero se ser el cabildero de sus reformas en el Senado.
“El futuro abanderado, sin ser nunca mencionado, aunque todos me conozcan por las reformas de AMLO. Soy ajeno a la traición, yo nunca me he rajado, sigo invicto en la elección en la que he participado”.
Señala su fe en el Santo Niño de Atocha como responsable de las “buenas cuentas” que ha entregado en los cargos que ha ostentado, pero es tajante y advierte que “yo ganaré a la buena, y será con Morena; ni nos vamos a dejar ni nos vamos a rajar, le duela a quien le duela”.
Ricardo Monreal ha sido crítico de los procesos internos de Morena, advirtiendo que no es el método de encuesta el que debe ser considerado para elegir a los candidatos del partido, acusando que se trata de un mecanismo maleable, todo ello pese al respaldo que el mismo presidente López Obrador ha mostrado a este proceso.
Ya en 2018, Monreal estuvo cerca de salir de Morena luego de que, como alcalde de Cuauhtémoc, no fuera elegido como candidato para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, situación con la que ha amagado nuevamente siendo enfático en la falta de un piso parejo para todos quienes aspiran a la Presidencia en 2024. CJG
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