Sin milagro; pandemia, recesión y elecciones

18 de Abril de 2024

Luis M Cruz
Luis M Cruz

Sin milagro; pandemia, recesión y elecciones

1.

A escasos días de las elecciones generales en los Estados Unidos no ha sucedido algún milagro para impactar a los electores. Si bien debiera haber un segundo debate entre los candidatos a la Presidencia, el show podría no cambiar mucho las tendencias; más bien la nota está en los récords observados en la votación anticipada. Nunca como ahora los electores se han esforzado por enviar por correo las boletas, considerada una verdadera pesadilla para la reelección, la cual se beneficiaría de una baja afluencia de votantes. Lo cierto es que millones de estadounidenses están rompiendo récords de participación electoral. En un entorno sin precedentes, los ciudadanos están buscando minimizar el riesgo de un contagio pero asegurando el sentido de su voto. Este año, los votantes ya han emitido casi el 20% del total de votos contados en los comicios de 2016 y podrían llegar a ser hasta un 30% de los sufragios.

2.

La continuidad de la administración Trump requería que una vacuna o un tratamiento asequible hubiera estado disponible antes de la crucial fecha electoral o bien, una reactivación económica rotunda, o ambas cuestiones a la vez. Sin embargo, esto no ha sucedido. Gravita en contra de una gestión displicente y deliberadamente omisa

—según testimonio presidencial recogido por Bob Woodard en su reciente libro (Furia, Simon&Schuster, 2020)— de la crisis sanitaria y el consecuente agravamiento de las perspectivas pues al momento el número de casos y muertes en Estados Unidos es superior a 8.5 millones y 225 mil personas respectivamente, manteniéndose en el lúgubre primer lugar del mundo. Al interior del país, California es el estado con el mayor número de contagios, seguido de Texas y Florida, entidades en donde las encuestas se decantan por Biden. Las preocupaciones alrededor del Covid-19 se seguirán incrementando, conforme algunas regiones del mundo han tocado nuevos máximos en los contagios, lo que está llevando a rigurosas medidas de contención con un inevitable impacto negativo en la actividad económica.

3.

Y las noticias siguen sucediéndose cual crónica de una debacle anunciada. Tras la reunión de invierno, los organismos financieros internacionales concluyeron que

la economía mundial enfrenta un camino largo e incierto para recuperar los niveles previos a la pandemia a pesar de un repunte inicial mejor de lo esperado, sobre todo en China, país en el que el letal virus se originara. En la perspectiva del Fondo Monetario Internacional, si se controla la crisis sanitaria (mediante vacuna oportuna y tratamiento eficaz disponible) será posible recuperar el crecimiento pero sin duda, éste será desigual e injusto, afectando más a los países más pobres y fiscalmente dependientes.

4.

El presidente Trump —en un intento por repuntar en las preferencias electorales, ante las encuestas en clara ventaja para Biden— pidió esta semana al Congreso un paquete de estímulo más grande del que había ofrecido anteriormente, si bien enfrenta la resistencia de sus correligionarios republicanos en el Senado, quienes están por un proyecto menor. Los negociadores de la Casa Blanca han propuesto un paquete de ayuda de 1.8 billones de dólares, por arriba de los 1.6 billones previos, aunque menor a los 2.2 millones que apoyan los Demócratas. El trasfondo es político-electoral, para mostrar quién ofrece el mayor respaldo a las necesidades de la gente.

5.

Para The Economist, todos los factores anteriores pueden llegar a configurar una tormenta postelectoral, dada la rijosidad y animosidad del presidente Trump por la controversia. Ya ha dicho que no confía en el voto por correo al sentir que no le favorece, pero también que habrá de respetar una transición si es que ésta se da. Lo cierto es que, como es usual en la democracia, al final tendrá que aceptar el sentido de la elección.